POLITICA

En su peor momento, Aníbal F. negó por Twitter estar "enemistado" con Garré

El jefe de Gabinete escribió sobre sus "enemigos", pero aclaró que "no es el caso de Nilda". Publicó su versión de los hechos de Soldati y le pegó a Macri.

Aníbal Fernández y Nilda Garré, en un acto por Malvinas en Ushuahia en abril de 2007.
| Télam

El jefe de Gabinete, Aníbal Fernández, negó hoy por medio de la red social Twitter estar "enemistado" con Nilda Garré, designada por la presidenta Cristina Fernández de Kirchner para ocupar la flamante cartera de Seguridad. "Mis enemigos son los que ponen sus favores personales por delante de las necesidades de otros. No es el caso de Nilda", afirmó el funcionario, respondiendo a las múltiples especulaciones surgidas en torno a los últimos cambios en el Gabinete que puso en marcha CFK.

La actual ministra de Defensa y Aníbal Fernández tuvieron en los años de la presidencia de Néstor y Cristina Kirchner varios encontronazos en la gestión y su rivalidad era uno de los secretos a voces de la era K. Ahora, con Garré designada para ocupar Seguridad y prometiendo revisar la corrupción policial, el tándem Aníbal Fernández-Julio Alak ha sufrido un golpe durísimo.

Aníbal F. y su versión de los hechos de Soldati: el jefe de Gabinete nacional volvió a acusar hoy al titular del Gobierno porteño, Mauricio Macri, de haber dado "origen" a la toma del Parque Indoamericano tras lanzar una promesa "electoral" como la entrega de escrituras a los propietarios de viviendas construidas en las villas.

Además, Fernández aseveró que Macri promovió la "escalada violenta" en la zona y pretendió el desalojo del predio "sin importar" la "sangre, heridos o muertos" que ocasionara la acción. En un artículo publicado hoy en su blog personal, Fernández hizo un resumen, según su visión, de los hechos ocurridos en la última semana luego de la toma de un parque público en el sur de la ciudad por parte de pobladores que reclaman viviendas dignas.

Fernández reiteró que "el Estado Nacional no está de acuerdo con la toma de ningún espacio público" y los ocupantes, dijo, "han manifestado que tampoco" avalan esa medida, pero es su "forma de llamar la atención" acerca de "la falta de planes de viviendas para la urbanización de villas". "Este conflicto sólo tiene solución política", insistió, pero aseguró que el gobierno porteño "se negó a llevar a cabo cualquier negociación con los ocupantes".

Según Fernández, "esta semana el PRO dio origen a su campaña electoral anunciando la entrega de títulos de propiedad de los terrenos sobre los que se habían construido casas en villas". "Alentados por esas promesas de inicio de campaña electoral, la gente de las villas se lanzó a ocupar el predio del Parque Indoamericano", consideró, a fin de exigir "las soluciones habitacionales prometidas".

Tras la ocupación, indicó el jefe de Gabinete nacional, "comenzó la violencia con el resultado de dos muertos", pero "la Policía Federal desalojó el predio y se lo entregó a la Policía Metropolitana que, insólitamente, permitió que retornaran los ocupantes".

"Al segundo día se desató una guerra entre un grupo de vecinos de Soldati y Lugano y los ocupantes", recordó. Macri, opinó Fernández, intento "presionar" al gobierno nacional para que se aparte "de la consigna innegociable" de "no reprimir las manifestaciones sociales". Según Fernández, el jefe del Ejecutivo porteño pretendió "desalojar el predio a los palos, sin importar sangre, heridos o muertos" y "se niega a entender, seguramente por su inexperiencia o su especulación politiquera, que esa solución es solución de un día". El funcionario nacional destacó que durante los hechos de violencia actuaron "barrabravas y delincuentes" mezclados con "vecinos honestos".

Además, recordó que la Nación propone financiar la entrega de tierras para que luego la Ciudad se haga cargo de la construcción de las viviendas necesarias. "No hablamos de regalar nada", sostuvo, porque el gobierno nacional no quiere "premiar la toma ni tampoco es ese el pedido de los ocupantes".

Macri, ratificó, promocionó la "escalada violenta" con sus "expresiones xenófobas", ante lo cual, aseguró, la Nación tomó "acciones unilaterales de inmediato". "Si bien somos convidados de piedra desde el punto de vista jurisdiccional, no lo somos desde el punto de vista de las convicciones. La gente nos importa, su situación nos importa", manifestó en el blog. El jefe de Gabinete sostuvo que la Nación no tuvo "más remedio que participar activamente para evitar una escalada sin límites" y opinó que "con medidas ciertas y comprobables, los vecinos desalojarán el predio, por su propia voluntad".

 

Fuente: DYN