El Procurador General de la Nación, Esteban Righi, presentó la renuncia a su cargo tras mantener un encuentro el secretario de Legal y Técnica, Carlos Zannini.
El estudio jurídico de Righi fue denunciado el jueves último por el vicepresidente Amado Boudou, durante su exposición en el Senado. Según la versión de Boudou, le ofrecieron hacer “lobby” en tribunales para evitarse escollos con la Justicia en dos reuniones, en julio de 2009 y en mayo de 2010.
“Me señalaron que por ser nuevito en esto y a fin de lograr resultados satisfactorios en la tramitación de las causas en general, debería contratar sus servicios, ya que adujeron tener buen lobby, influencia y contactos en la mayoría de los juzgados federales Comodoro Py. Les expliqué que no creía encontrarme comprendido en ninguna de las situaciones judiciales que ellos indicaban y así fue que los despedí”, dice el escrito que el vicepresidente presentó ante la Justicia.
En la nota que anticipó la dimisión de Righi, publicada hoy por el diario Página/12, se consigna que el jefe de los fiscales regresó de Nueva York con la “decisión tomada”. Ahora, el Ejecutivo deberá proponer un reemplazo en la Procuración y el Senado deberá aprobarlo.
“Ya en 2010, siendo ahora ministro de Economía, fui nuevamente visitado por los nombrados profesionales el 20 de mayo de aquel año”, añade la presentación de Boudou. “Me reiteraron el ofrecimiento de sus servicios, ya que sólo contando con la capacidad de lobby que ellos poseían lograría cerrar causas en trámite. En esta segunda reunión estuvo mi letrado, el doctor Eduardo Durañona, y me quedé con la sensación de estar en presencia de persona que venden humo”.
La denuncia de Boudou quedó a cargo del juez Ariel Lijo y el fiscal Jorge Di Lello.