Tras la extracción de sangre y saliva de los hermanos Marcela y Felipe Noble Herrera, la presidenta de Abuelas de Plaza de Mayo, Estela de Carlotto, señaló que piensa que en esta decisión hay "cosas malintencionadas", ya que, según afirmó, el Grupo Clarín "compró jueces, como Bergesio y Cavallo" en la causa que investiga si los hijos de la dueña del grupo, Ernestina Herrera de Noble, fueron apropiados ilegalmente. En tanto, se espera que las muestras biológicas queden almacenadas en Archivo Nacional de Datos Genéticos para que también sean cotejadas con muestras futuras.
"Hay que pensar mal porque las cosas están malintencionadas", declaró Carlotto en diálogo con Radio América, luego de afirmar que "se compraron jueces, como Bergesio y Cavallo", en referencia al ex juez Gabriel Cavallo -abogado de Ernestina–, y al juez Conrado Bergessio, quien fue apartado de la causa por la Cámara Federal, que ahora está en manos de la jueza Sandra Arroyo Salgado.
La titular de Madres expresó su "sorpresa de que la iniciativa haya surgido de un día para el otro" y consideró la explicación de los hermanos "bastante absurda". Y señaló: "Aceptan hacer todo y rápidamente, pero empiezan las contradicciones, quizá por estar en una etapa electoral". Luego, Carlotto destacó que "la decisión debió darse hace diez años, durante los que hicieron tantas cosas absurdas e ilegales".
Carlotto agregó que los hermanos "alegan problemas de salud de su madre adoptiva y dicen cosas que realmente no podemos entender". E indicó: "Llegamos a la etapa final, que será en donde corresponde y en tiempo y forma para comprarlo con todo el banco, eso es lo más importante".
"Es lo que hemos esperado diez años", señaló, luego de sostener que "es lo necesario para saber si Felipe y Marcela Noble Herrera son o no los nietos que buscamos". Al tiempo que destacó que, "de no ser los nietos que buscamos, su sangre quedará en el Banco Nacional de Datos Genéticos a la espera de nuevas denuncias, que se producen permanentemente".
En efecto, las muestras biológicas que entregaron el viernes al Banco Nacional de Datos Genéticos (BNDG) los hermanos Noble Herrera deberán quedar almacenadas como parte del Archivo Nacional de Datos Genéticos, "con el único objeto de asegurar su comparación con los datos que se incorporen en el futuro", informó ayer el diario PERFIL.
Esto deberá hacerse más allá del resultado al que se arribe con el próximo entrecruzamiento que deberá ordenar la jueza federal de San Isidro Arroyo Salgado con las muestras obtenidas después de diez años de apertura de la causa judicial.
Fuentes judiciales explicaron que así lo establece la Ley 26.548, de creación del Banco Nacional de Datos Genéticos, que dispone en su artículo 6º que "la información genética ingresada".
La ley que creó el BNDG sostiene además que en el Archivo "se registrará la información genética de aquellas personas cuyas muestras hayan sido remitidas al Banco Nacional de Datos Genéticos a través de una causa judicial, así como aquella que se haya aportado a través de la Comisión Nacional por el Derecho a la Identidad".