Un nuevo grupo de malvados que buscan perjudicar al país y al imparable crecimiento económico se está afianzando -según el presidente Néstor Kirchner y sus seguidores- en los rincones de la especulación (o imaginación) financiera: "Los desestabilizadores inflacionarios".
Ayer Kirchner apuntó contra "sectores que buscan generar un estado de alarma en torno a los precios para incrementar sus réditos". Kirchner los calificó de "demandantes de inflación, que siempre lucraron a partir de la especulación" y los acusó de que querer "desestabilizar con la inflación".
Desde la mañana temprano, pequeños y medianos empresarios, grandes industriales y funcionarios (y ex funacionarios) de destacada jerarquía nacional y provincial salieron a repetir las ataques del jefe de Estado contra el temido grupo de enemigos, "los desestabilizadores inflacionarios".
El presidente de la Unión Industrial Argentina (UIA) Juan Carlos Lascurian, volvió a desestimar el impacto negativo de la inflación actual en el crecimiento económico y denunció que existen "sectores minoritarios que intentan dificultar el desarrollo de un proyecto productivo", pero no los identificó.
"Hay un énfasis de ciertos sectores minoritarios en remarcar eventuales dificultades o intentar generar un escenario de temor frente a la inflación", sostuvo el titular de la central fabril.
En la misma línea, el presidente de la flamante Confederación Empresaria de la República Argentina (CERA), Marcelo Fernández, advirtió hoy que "hay sectores que utilizan el argumento inflacionario para intentar cambiar el rumbo económico".
"Los sectores de pymes han tenido en estos años una notable recuperación y hay pequeños grupos neoliberales que nos llevaron al desastre económico que vuelven a atacar, pretendiendo generar dudas sobre la marcha de la economía argentina", indicó Fernández.
Otro que se sumó a la batalla contra "los desestabilizadores inflacionarios" fue el presidente de la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME), Osvaldo Cornide. Cornide sostuvo al igual que Kirchner, Lascurian y Fernández que quienes alertan sobre un proceso inflacionario son "sectores especulativos y neoliberales", o sea "los desestabilizadores".
"Decir que hay inflación descontrolada es una barbaridad; es producto de la campaña electoral", dijo Cornide. El titular de la CAME incorporó una definición hasta ahora desconocida: "los desestabilizadores" tiene intereses en los resultados del 28 de octubre, un dato que nunca le fue ajeno al Presidente.
En la catarata de acusaciones contra el enemigo anónimo y amorfo del Gobierno, también aparecieron el jefe de Gabinete, Alberto Fernández, y el gobernador de San Juan, José Luis Gioja.
Fernández repitió la tesis oficial y negó hoy que haya un "brote inflacionario" en la Argentina, a la vez que desmintió que existan aumentos de precios generalizados. En su lugar, prefirió atacar a la oposición, a quienes culpó de estar "jugando peligrosamente" con el tema.
El jefe de ministros insistió en que "los precios se acomodan por una demanda creciente" y consideró que los aumentos estacionales de productos como el tomate "no justifican hablar de inflación".
El sanjuanino arremetió contra los archienemigos desconocidos de Kirchner y advirtió que "en la Argentina de hoy, hay que entender que ya no sirve especular". En un mensaje a los desestabilizadotes inflacionarios, Gioja dijo que sus palabras, como las de Kirchner de ayer en un encuentro privado con empresarios, "las tienen que comprender los que hoy se frotan las manos con la idea de que haya inflación para beneficiarse, y que son los mismos que en el 2003 decían que el dólar iba a costar 20 pesos y que se equivocaron de cabo a rabo".
El análisis del ex subsecretario de Tierra y Habitat , Luis D' Elía, fue más allás de todo . Para el líder piquetero "la inflación es el instrumento que pretenden usar los grupos concentrados de la economía, para expoliar una vez más la posibilidad de distribución de la renta nacional a los trabajadores y al pueblo argentino".
Sin pelos en la lengua, agregó que "hoy quieren darle un golpe de Estado económico a Kirchner y a la democracia argentina, utilizando estos instrumentos".
Fuente: DyN y Télam