"Es un mamarracho, un absurdo que no tiene nada que ver con la realidad. Esto es un apriete, no se crean que a mi me van a apretar con esto", se defendió esta mañana Moyano en declaraciones a Radio Mitre.
El impulso de Oyarbide se conoce apenas un año después de que la fiscal suiza María Antonella Bino reclamara datos sobre las causas abiertas contra Moyano, sus hijos y su familia en Argentina después que se congelaran fondos por 1.870.000 dólares en una cuenta de Ricardo Depresbiteris, dueño de Covelia y su mujer, Marcela Elvira Mete con la sospecha de un origen ilícito de esos fondos, relacionado a Moyano.
"Acá nadie hace una mueca, una seña para jugar al truco si no se lo autorizan", disparó el líder de la central de trabajadores en clara alusión a un guiño de la Casa Rosada al magistrado.
