Tucumán – El ex represor Antonio Bussi fue internado hoy en una clínica privada de la capital mediterránea por problemas de salud, días después de que un fiscal solicitara que sea sometido a juicio oral por violaciones a los derechos humanos durante la última dictadura militar.
“Lo llevamos en una ambulancia al sanatorio. Está compensado y con los signos vitales normales. Padece una arritmia muy pronunciada, lo que le causa una aceleración de sus pulsaciones”, sostuvo Luis José Bussi, uno de los hijos del ex represor tucumano.
El ex gobernador de la provincia fue trasladado al centro de salud desde el ex arsenal Miguel de Azcuénaga, ubicado en las afueras de esta ciudad, donde cumple prisión preventiva por crímenes de lesa humanidad. Bussi, quien padece problemas cardíacos, continuaba internado esta tarde en observación.
En tanto, su hijo Luis José negó que la internación esté relacionada con el pedido de enjuiciamiento formulada por el fiscal federal Emilio Ferrer. Es que el fiscal requirió que tanto Bussi como el ex general Luciano Benjamín Menéndez, imputados en medio millar de causas de derechos humanos, sean sometidos a juicio por el Tribunal Oral en lo Criminal Federal por la desaparición del ex senador provincial justicialista Guillermo Vargas Aignasse, ocurrida en 1976.
“Esta es la quinta vez que sufre esta clase de arritmia y porque la posibilidad de un juicio oral es remota, dado que el caso será llevado ante la Corte Suprema de Justicia de la Nación”, sostuvo el hijo del ex mandatario. Es que en marzo de 1976, cuando se produjo la desaparición de Vargas Aignasse, Bussi estaba al frente de la V Brigada de Infantería, con asiento en Tucumán, que a su vez dependía del III Cuerpo de Ejército, que encabezaba Menéndez en Córdoba.
Daniel Bejas, a cargo del juzgado federal número uno, deberá resolver el requerimiento del fiscal y, si hiciera lugar a su pedido, elevará la causa al Tribunal Oral en lo Criminal Federal, para que, eventualmente, sustancie las audiencias de debate del juicio oral.
Bussi fue detenido en octubre de 2003 y en noviembre de ese año fue trasladado a Buenos Aires bajo arresto domiciliario por la desaparición de Vargas Aignasse. Como consecuencia de la detención, Bussi no pudo asumir la intendencia de la capital tucumana, cargo para el que había sido electo el 26 de junio de 2003, cuando, al frente de Fuerza Republicana.
El 16 de marzo de 2006, el ex funcionario fue trasladado en un avión sanitario desde Buenos Aires, donde estaba bajo arresto domiciliario desde 2003. Desde su llegada a Tucumán, Bussi –al igual que Menéndez– concurrieron casi todas la semanas a la sede de los Tribunales Federales para declarar en las numerosas causas judiciales que se les sustancian por violaciones a los derechos humanos.
Fuente: Télam
