POLITICA
la obra en los piletones

Internas familiares y barriales apuntan a Margarita Barrientos

Su hermana dice que la echó del comedor. Sectores vecinales denuncian discrecionalidad en el manejo de recursos. Qué dice la dirigente social.

Piletones. La figura de Margarita Barrientos genera cierta polémica entre algunos de sus vecinos.
| Cedoc Perfil

Nilda Escalada puso la lupa sobre su hermana Margarita Barrientos. La acusó de haberla echado del comedor Los Piletones y de no haberla protegido ante un intento de abuso. “La plata la cambió”, remató Nilda, una mujer de 50 años y enferma de epilepsia. Histórica dirigente social de Villa Soldati, Margarita Barrientos profundizó en los últimos años su acercamiento al PRO. Desde el barrio en donde trabaja, algunos vecinos y militantes de la oposición criticaron cierta discrecionalidad en el manejo de recursos, en paralelo al aprovechamiento político de su obra por parte del macrismo.

Si bien vive en el barrio Los Piletones, Nilda Escalada ya no tiene contacto con su hermana. Fueron criadas por padres distintos. En 1999 llegó desde Santiago del Estero a Buenos Aires, donde paró en un hogar transitorio. Tras ver por TV a su hermana en el programa de Mirtha Legrand, consiguió contactarse con ella: bajo su responsabilidad legal, Margarita la llevó a vivir a Los Piletones.

Esto no les gusta a los autoritarios
El ejercicio del periodismo profesional y crítico es un pilar fundamental de la democracia. Por eso molesta a quienes creen ser los dueños de la verdad.
Hoy más que nunca Suscribite

El amor le duró poco. Me puso en una pieza chiquita con un señor de la calle que quiso abusar de mí. Se lo dije a mi hermana y me respondió que no me iba a hacer nada porque era un hombre mayor”, relata Nilda. En 2001, la relación entre ambas se rompió, según su relato. “Estaba perseguida: pensaba que la iba a denunciar o robar. Y un día me echó”, afirma Nilda, quien vive en una casa a la que accedió gracias a una gestión de la Junta Vecinal. Margarita Barrientos desmiente haberla echado: “Vivió acá un tiempito pero se fue porque no le gustaba. Quería estar sola. Es una persona egoísta. De todas formas, Barrientos abre la puerta a una posible reconciliación: “Quisiera tomar unos mates con ella”.

En Soldati, un sector peronista no alineado con el de Barrientos ganó las elecciones vecinales: de hecho, Beatriz Antunez (hija de Margarita e Isidro Antunez) quedó relegada al tercer puesto.

Ella habla injustamente en nombre del barrio: dice que estamos bien, que está todo urbanizado gracias al gobierno porteño, y eso es falso”, protesta la actual presidenta de la Junta Vecinal de Los Piletones, Mónica Ruejas, ex ibarrista, hoy enrolada en el PJ no kirchnerista. En abril del año pasado, Horacio Rodríguez Larreta junto a María Eugenia Vidal (de campaña) anunciaron la “urbanización de Los Piletones”, y la presentaron como una suerte de modelo de gestión PRO. Algunos vecinos, sin embargo, lo cuestionan. Para la Asociación Civil por la Igualdad y la Justicia, el mejoramiento del “90% de Los Piletones” es insostenible. Según esa ONG, el macrismo sólo concretó el “asfaltado de algunas calles, el embellecimiento de fachadas de las casas que están en los límites del barrio, la refacción del polideportivo y del bajoautopista”.

Algunos vecinos hicieron circular fotos de Facebook algo comprometedoras para los familiares de Barrientos y, en apariencia, reñidas con la causa de Los Piletones. En una se ve a su hijo, Oscar Antunez, empleado estatal porteño, de vacaciones en Cancún; en otra aparece otro de sus hijos, Lucas Escalada Jerez, policía de la Metropolitana de 22 años, posando arriba de su Volkswagen Vento nuevo; y en la última está el nieto de Barrientos (hijo de Beatriz) contando pilones de billetes de 100 pesos.

“Fue utilizada por la política”

Si bien el Gobierno no cuenta con el apoyo mayoritario de los gremios y las organizaciones sociales, Margarita Barrientos y su comedor se convirtieron en una notoria excepción. “Antonia come guiso en nuestra guardería”, afirmó Barrientos hace poco, en referencia a la hija de Macri. Esa cercanía le valió algunas críticas dentro del barrio, donde la mayor parte de las obras estatales las realiza la cooperativa La Unión Limitada, cuyo presidente es el esposo de Margarita, Isidro Antunez. “Fue utilizada por el poder político y algunos medios de comunicación, con el objetivo de defender intereses que poco tienen que ver con Los Piletones”, afirmó el líder de la Confederación de Trabajadores de la Economía Popular (CTEP), Juan Grabois.