POLITICA
Nunca haba ido y soport duras crticas

Jaime habló de Aerolíneas en el Congreso

Aseguró que será el Parlamento el que defina que se hace con la devastada empresa aérea. Los opositores lo acusaron de ser un funcionario "ruinoso para los intereses del país".

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El polémico secretario de Transporte, Ricardo Jaime, defendió en el Congreso las negociaciones por el traspaso accionario de Aerolíneas Argentinas con el argumento de la defensa de la fuentes de trabajo para los 9 mil empleados de la empresa y de las rutas aéreas, en un contexto de fuertes críticas a su gestión de cinco años en el área por parte de la oposición.

Jaime señaló que, de acuerdo con estimaciones judiciales, la deuda total de las empresas Aerolíneas Argentinas y Austral asciende a casi 900 millones de dólares y aclaró que la definición final del tema, tanto en la tasación de la operación como en la reestatización de la empresa, "quedará en manos del Congreso", lo cual puede entenderse como otra señal del cambio de orientación del oficialismo en el tratamientos de temas centrales. Afirmó que, en su opinión, por el traspaso de la aerolíneas "no se debe pagar nada" por parte del Estado ante los integrantes de las comisiones de Transportes y Presupuesto de la Cámara baja, en una reunión que duró casi cinco horas.

Respecto a la deuda estimada por la Sindicatura ante la justicia que interviene en la convocatoria de las referidas líneas aéreas, indicó que "la deuda total de Aerolíneas Argentinas es de 740.004.305 dólares, de los cuales son exigibles 186.455.902 dólares, y la de Austral es de 150.679.917 dólares, y de ellos son exigibles 53.961.160 dólares".

También, desestimó que, una vez saneada, la aerolínea vaya a ser reprivatizada, cuando se le indicó que esa posibilidad quedaría abierta con el artículo 6 del proyecto de acuerdo alcanzado hasta el momento con el Grupo Marsans. Jaime prometió un plan a mediano plazo para la compra de nuevos aviones y rechazó otras alternativas para hacerse cargo de la empresa como la expropiación directa o el pedido de quiebras, reclamados por algunos sectores de la oposición.

Al respecto, sostuvo que una expropiación directa dejaría un antecedente negativo para futuras inversiones privadas y que con la quiebra se perderían las rutas aéreas, cuya recuperación con una nueva empresa aérea llevaría años, además de la pérdida de la fuente laboral para los actuales empleados. También, el funcionario, que pasó en el mismo cargo por la gestión de Néstor Kirchner, debió soportar las quejas por no haber asistido antes a la Cámara pese a los reiterados pedidos para que así lo hiciera.

En ese sentido, se pronunció, por ejemplo, el radical jujeño Alejandro Nieva, quien además le lanzó: "Su paso por la función pública ha sido ruinoso para los intereses del país".

El ex arista y actual Espacio SI Carlos Raimundi aprovechó la ocasión para decirle en la cara: "Repudio la política de transporte público de su Secretaría" y su ex compañero y ahora jefe del bloque Coalición Cívica, Adrián Pérez consignó: "No estamos dispuestos a hacernos cargo del robo de Marsans ni de la irresponsabilidad del secretario de transporte". Pérez le cuestionó a Jaime que haya sostenido que el Estado tuvo en estos años una política activa respecto a Aerolíneas, y se preguntó de qué política hablaba si acababa de dar el diagnóstico de "una situación calamitosa por vaciamiento de la empresa, lo que demuestra que hubo omisión y connivencia del gobierno respecto del operador privado".

El diputado de Proyecto Sur Claudio Lozano alertó sobre el peligro de una reprivatización encubierta por el polémico artículo 6 del proyecto oficial y propuso que se avance en una ley que tenga tres premisas: "garantizar el servicio aerocomercial, no dilapidar los recursos públicos y la continuidad laboral de los trabajadores".

Si bien es cierto que los diputados oficialistas casi ni hablaron, el socialista filo-K y dirigente sindical aeronáutico Ariel Basteiro fue una de las pocas voces que defendió lo actuado por el gobierno hasta el momento en el tema, recordó haber hecho catorce denuncias por vaciamiento de la empresa y fustigó a los opositores por criticar ahora pero no haberlo acompañado en las referidas ocasiones. En similar sintonía había hablado antes el kirchnerista santafesino Alejandro Rossi, quien recordó que en épocas de la Alianza se resolvió la "continuidad" de lo actuado en el sector en la década del '90 y acusó a la oposición de actuar con intencionalidad "política".

Fuente: DYN