José Rodríguez, histórico dirigente del Sindicato de Mecánicos y Afines del Transporte Automotor (SMATA), acaba de abandonar el cargo al frente del gremio, al pedir una licencia por problemas de salud, aunque se sospecha que podría haber otras razones ligadas a problemas judiciales.
A sus 73 años, Rodríguez fue reemplazado por su adjunto, Mario Manrique, quien -según informa el diario Clarín- habría avanzado sobre el poder de Rodríguez en el sindicato: un ejemplo sería la influencia que tienen sus hijos sobre la obra social del gremio, OSMATA.
Precisamente, la justicia investigaba a Rodríguez por los manejos de la obra social. La fiscal Mónica Cuñarro de la Cámara de Apelaciones en lo Criminal investigaba un presunto fraude de 12 millones de dólares en el manejo de OSMATA. Además, fue indagado por cuentas bancarias en Suiza y Alemania, y por la Unidad Fiscal de Investigación de delitos Tributarios y Contrabando, según Clarín.
Rodríguez llegó a Secretario General de SMATA en 1973, cuando el gremio todavía tenía unos 120.000 afiliados. Hoy sigue siendo uno de los más poderosos del país, aunque con sólo 80.000 miembros. Fue uno de los impulsores de la resistencia sindical contra la dictadura, y participó de los 25 gremios que hicieron paro en 1982.
Fue, además, electo dos veces diputado por el Partido Justicialista, y en los últimos años se alió con "los gordos" de la Confederación General del Trabajo (CGT), opuestos a la conducción oficialista de Hugo Moyano.