El kirchnerismo apeló dos veces en dos años a candidatos “importados” para encabezar listas. Fue en las elecciones de 2005 y 2007. Primero, impuso a Cristina Fernández como senadora por la provincia de Buenos Aires, pese a que hasta entonces ella representaba a Santa Cruz. Luego trasladó al porteño Daniel Scioli de la Capital Federal al territorio bonaerense, para retener la Gobernación, porque era el único que garantizaba la victoria.
En ambos casos, los apoderados K tuvieron que echar mano a artilugios legales para eludir los requisitos que impone la Constitución a aquellos que deseen representar a un distrito que les es ajeno.
Los estrategas electorales del PJ tendrán que agudizar su ingenio si se concreta el mensaje que, Néstor Kirchner les comunicó a todos sus allegados en las últimas semanas: que él será el postulante oficial a diputado nacional por la provincia de Buenos Aires .
Es que el ex presidente nació en Santa Cruz y aún conserva su domicilio en Río Gallegos, con lo cual no estaría cumpliendo con ninguna de las exigencias que demanda la Carta Magna.
Reconocidos constitucionalistas advirtieron en diálogo con Perfil que la posible candidatura de Kirchner no se ajusta a la legislación vigente, porque el artículo 34 de la Constitución establece que vivir en un lugar como consecuencia de estar en ejercicio de un servicio federal (en este caso la Presidencia) no otorga residencia electiva.
Pero además afirmaron que aunque pudiera poner la Quinta de Olivos como su domicilio, no demostraría con eso su arraigo al territorio, objeto con el cual se impuso la demanda de ser nativo de la provincia a representar o vivir en ella en los años previos a los comicios.
“Durante su presidencia, Néstor Kirchner tenía como domicilio fiscal la Casa de Gobierno, pero estaba en Olivos. Sin embargo, vivía la mayor parte del tiempo en Capital Federal y estaba en la provincia sólo para dormir”, indicó el constitucionalista Daniel Sabsay.
