POLITICA
más restricciones

Kicillof define con Alberto F. y Larreta busca tender puentes

Con el sistema sanitario casi colapsado, la Ciudad intenta acercar posiciones con el gobernador bonaerense antes de sentarse con el Presidente. Analizan nuevas medidas.

20210424_kicillof_larreta_gpba_g
Dúo. El gobernador bonaerense y el jefe de Gobierno porteño podrían dejar los dardos políticos para volver a avanzar con nuevas cierres a partir del 30 de abril. | GPBA

“Si arreglamos con Provincia, se arregla con Nación”. Ese escenario imagina por estas horas la mesa chica del gobierno de Horacio Rodríguez Larreta en lo que al manejo de la pandemia de coronavirus se refiere. Por eso, las primeras negociaciones después de la interrupción del diálogo y la judicialización de las restricciones impuestas por Alberto Fernández no serán con el Presidente sino entre las administraciones de Larreta y Axel Kicillof.

Ayer por la tarde, el gobernador bonaerense visitó en su despacho de la Casa Rosada al Presidente. Ambos están dispuestos a continuar con las restricciones e, incluso, ir más allá el 30 de abril.  El récord de 556 muertos que se registró ayer no hizo más que sostener el nivel de alarma que ya venían evaluando. Las clases presenciales seguirían cerradas y podrían incluirse nuevos cierres. En el encuentro, que duró más de dos horas, analizaron además cómo ampliar el sistema sanitario en el Conurbano bonaerense.

En ese marco, desde el Gobierno nacional estiman que Larreta deberá volver a recomponer la relación con el Ejecutivo nacional, ya que la cantidad de muertes y contagios terminará por “arrastrar” al vacío su última estrategia frente a la pandemia.

Ciudad-Provincia. Los puentes volvieron a tenderse y el objetivo es que los funcionarios que administran la pandemia de uno y del otro lado de la General Paz puedan volver a contrastar los números de las últimas horas y tener un punto de partida en común. En los últimos días ni siquiera se pusieron de acuerdo en datos como ocupación de camas, uso de transporte público y la curva de contagio por edades.

Alberto Fernández y Axel Kicillof analizaron el cupo de camas en la provincia de Buenos Aires

Una foto entre Larreta y Kicillof será difícil, pero ambas gestiones admiten que sus jefes de Gabinete y ministros de Salud pueden ser parte de ese primer acercamiento. La idea es que estas conversaciones se retomen en las próximas horas.

Las charlas informales nunca se cortaron, incluso Kicillof siempre mantuvo abierto el diálogo y siguió hablando con funcionarios porteños, como el vicejefe de Gabinete, Diego Santilli. Este último es uno de los que buscan una salida coordinada a las medidas que tomó el Presidente una semana atrás, sin consultar ni avisar.

El gobernador bonaerense es el más duro cuando se trata de pensar en nuevas medidas y en la Ciudad saben que tuvo mucho que ver con el ajuste de las restricciones de la última semana. No fue una decisión unilateral de Fernández. Pero entienden que es un dirigente con el que se puede acordar y si se acuerda con él, hay acuerdo con Nación garantizado, por eso, el gobierno de Larreta entiende que las próximas medidas deben empezar a coordinarse con Kicillof.

“No es tan fácil”, responden desde el gobierno nacional. Y agregan: “Por algo Alberto siempre debió mediar entre ambas administraciones cuando el resto de los gobernadores toman las decisiones solos”.  

El escenario en los últimos días cambió y ahora el Gobierno de la Ciudad admite que se deberá avanzar en algunas medidas para contener aún más el coronavirus. Después de llegar a un pico de cerca de 30 mil casos a nivel nacional, ambas gestiones explican que la curva muestra un comportamiento de un serrucho que sube y baja en un nivel alto de contagios. Ayer, el ministro de Salud de la Ciudad, Fernán Quirós, detalló que “se estabilizaron los casos pero necesitamos que desciendan”. “Esto no pueden seguir así diez días más”, reconocen en la Ciudad. El 30 de abril vencen las medidas implementadas por Fernández y mientras la Corte debe definir la disputa por las clases presenciales, las administraciones de Larreta y Kicillof serían las que dejen la disputa atrás y retomen el diálogo para volver a coordinar medidas para el AMBA.

Berni: "Tenemos que ir a una cuarentena de verdad, donde absolutamente todo esté cerrado"

“Siempre estamos abiertos al diálogo y pudimos coordinar medidas un año a pesar de las diferencias, pero si Macri va a decidir y no Larreta, va a ser difícil un punto de encuentro”, dicen desde la Provincia.

¿Se podrá repetir la foto entre Alberto Fernández y Horacio Rodríguez Larreta? En la Casa Rosada son más reacios que en la sede de Uspallata, aunque ambas gestiones reconocen que por los números de contagios esto va a ser inevitable.  Después de sentarse con Provincia y destrabar la discusión con Kicillof, un nuevo encuentro entre el Presidente y el jefe de Gobierno porteño podría producirse incluso antes del 30 de abril, fecha en la que vencen las medidas impuestas por Fernández. Ahora hay apenas un diálogo cortante que se da entre Santilli y el secretario general de la Presidencia, Julio Vitobello. O entre los jefes de Gabinete, Santiago Cafiero y Felipe Miguel.

Los cruces que comenzaron con la suspensión de clases presenciales judicializadas fueron en aumento y en las últimas horas se sumaron acusaciones de funcionarios nacionales a la Ciudad por la falta de controles e irregularidades en la inscripción para vacunarse a través del PAMI.

“No me mandés una carta pública si hablamos por privado todos los días”, le reprochó un funcionario de la Ciudad a su par de Nación sobre la misiva del Ministerio de Seguridad por la falta de controles. Según pudo saber PERFIL, el fin de semana anterior se recibieron 579 denuncias. “No podemos matar a los pocos que siguen abiertos porque tienen dos mesas ocupadas adentro, hicimos cumplir las normas y todos los barrios gastronómicos que aglutinan gente están cerrados pero a Alberto alguien le manda un mensaje porque ve un local con una mesa funcionando y eso termina en una carta pública”, explicaban en la Ciudad.

Mientras tanto, desde ambos gobiernos esperan la resolución de la Corte. En caso de que las negociaciones no avancen y el diálogo entre Fernández y Larreta siga roto, la decisión del máximo tribunal terminará incidiendo sobre quién tomará las decisiones durante los próximos meses.