Así lo reflejaron fuentes cercanas al ex presidente al decir, consultadas por la agencia DyN, que "de ninguna manera Kirchner va a declinar" su candidatura, que fuera propuesta por el presidente de Ecuador, Rafael Correa, en agosto pasado en Buenos Aires.
A partir de entonces, el marido de Cristina Fernández recolectó apoyos de varios jefes de Estado como Lula, Michelle Bachelet, Hugo Chávez y Evo Morales. Pero Uruguay siempre se mostró contrario a la idea, lo que generó el enojo del gobierno argentino. Al principio, no obstante, el país oriental pensaba abstenerse a la hora de la votación correspondiente, lo que no impediría a Kirchner hacerse del cargo.
Finalmente, el gobierno uruguayo decidió transformar su voto en negativo, lo que, por más que el argentino cuente con el respaldo de 11 de los 12 países que integran la organización, imposibilitaría su elección, ya que se necesita el visto bueno de todas las naciones que forman el grupo.
La actitud uruguaya desató el enojo del gobierno nacional, que la consideró como "un agravio a los argentinos, a la UNASUR y a los países que apoyan la candidatura del ex presidente Néstor Kirchner".
Lo cierto es que, tras algunas versiones que corrieron en el sentido de que Kirchner abandonaría su postulación, los colaboradores del actual jefe del Partido Justicialista Nacional son categóricos al respecto: "Lo desmentimos absolutamente", dicen.
El mes próximo, en Brasilia y luego del encuentro de Jefes de Estado del Mercosur, se celebrará un nuevo cónclave de la UNASUR, que podría servir para que se defina el nombre de su nuevo Secretario General.
Motivos. La negativa de Uruguay de rechazar la designación de Kirchner se debe al conflicto fronterizo que mantienen los dos países desde hace más de dos años, debido a la instalación de la papelera Botnia. El gobierno de Tabaré Vázquez acusa al ex Presidente de no impedir los cortes que imposibilitan la comunicación por tierra de las ciudades de Gualeguaychú y Fray Bentos.
De acuerdo a trascendidos, el gobierno argentino iba a intentar convencer a Tabaré Vázquez en la última Cumbre Iberoamericana de Jefes de Estado en el El Salvador, pero la ausencia del mandatario uruguayo terminó de enfriar las relaciones bilaterales.
Kirchner y Vázquez fueron en una primera época aliados regionales e incluso el santacruceño alentó la candidatura del uruguayo, cuando éste último todavía aspiraba a la presidencia del país vecino.