Este martes el ministro de Trabajo, Jorge Triaca, presentó un informe ante el presidente Mauricio Macri y el resto de sus pares en una reunión de Gabinete en referencia al conflicto que tuvo con la empleada doméstica de su familia, Sandra Heredia. El mismo será elevado a la Oficina Anticorrupción para que sea evaluado.
Ante eso, el Ejecutivo dio por concluido el caso. Sin embargo, la polémica dentro del círculo familiar del ministro va a seguir. Heredia demandó a Carlos Triaca, su empleador, y le reclama el pago de $ 3.700.000,00 en concepto de “daños y perjuicios” por las declaraciones que hizo el hermano del funcionario en medios nacionales, según publicó OPI Santa Cruz.
La empleada ya había llegado a un acuerdo con el hermano de Triaca este mes por su despido. Según el acta del 19 de enero realizada por la delegación San Isidro del Ministerio de Trabajo de la Provincia de Buenos Aires, la mujer aceptó el pago de una indemnización de parte de Carlos Triaca.
Sin embargo, ahora su reclamo tiene que ver con las manifestaciones públicas que Carlos Triaca realizó para justificar su despido. Ayer, Heredia le cursó una carta documento en la cual le formula una intimación para que “ratifique o rectifique” sus dichos en el programa de televisión conducido por Rolando Graña en América Tv el día 16 de enero de 2018.
En el documento al que tuvo acceso OPI, la mujer sostiene que el hermano del ministro la acusó “de manera falaz, maliciosa y sin sustento legal alguno" de su mal trabajo. Y en ese punto cita las declaraciones de Triaca: “En los últimos años, hubo faltantes en la casa lo cual llevó a una mala relación en los últimos meses, por eso yo la tuve que despedir".
Y amplió: "Asimismo, no conforme con tan grave acusación, refirió que: '…esta persona, es una persona que tiene una enfermedad bastante grande, no física, sino psíquica…'”. La demandate considera que en ese medio público Carlos Triaca se manifestó “de manera inapropiada extralimitándose manifiesta y públicamente al referirse a mí, en términos que afectan mi imagen personal, como así también mi honor y decoro al recurrir a expresiones ofensivas e hirientes que atentan contra mi reputación, lo intimo a que se retracte de todas las calumnias e injurias que ha difundido”.
Ante eso, le reclama además del pago de $ 3.700.000,00) en concepto de daños y perjuicios, que "se abstenga de formular todo tipo de opiniones, sean o no descalificadoras o peyorativas, sobre aspectos de mi vida personal”.