Si la Plaza de Mayo del 27 de octubre de 2010, día del fallecimiento de Néstor Kirchner, fue de luto, la de un año después fue de festejo. En homenaje al expresidente, el oficialismo se movilizó para recordarlo, pero también para celebrar el contundente triunfo electoral de Cristina Fernández de Kirchner y la reciente condena a los represores acusados en la megacausa ESMA.
Por eso, las principales protagonistas de la jornada fueron las Madres de Plaza de Mayo, que realizaron una radio abierta "para hablar con Néstor", con la participación de Hebe de Bonafini y Amado Boudou, entre otros.
La otra atracción de la plaza fueron los mineros de Río Turbio, que ingresaron a bordo de una 4x4 que remolcaba la estatua de Néstor Kirchner realizada en homenaje al expresidente. El público los saludaba y se sacaba fotos con ellos.
"Néstor no se murió, Néstor no se murió", coreaban los kirchneristas, agrupados o independientes, mientras las Madres realizaban la radio abierta. A diferencia del año pasado, nadie se acordó del vicepresidente saliente Julio Cobos: en 2010 le cantaban "andate Cobos la p... que te parió".
Una pequeña multitud, entre ellos el famoso "maratonista K", se abalanzó sobre Boudou cuando terminó su discurso. El ministro de Economía huyó a las corridas por la calle Reconquista, perseguido por sus fans, mientras otros se acercaban al escenario donde esperaban a La Mancha de Rolando, banda preferida del funcionario.
Gorros, banderas, estampitas y sobretodo remeras se vendían en la Plaza de Mayo casi tanto como los choripanes. Una banda tocaba la marcha peronista junto a los mineros de Río Turbio y la misma melodía salía desde un viejo micro reconvertido en radio móvil.
"Quisiera que me recuerden sin llorar ni lamentarme, quisiera que me recuerden junto a la risa de los felices", palabras del poeta desaparecido Joaquín Areta que leyó alguna vez Néstor Kirchner en la Feria del Libro. Le hicieron caso: la Plaza de Mayo era una fiesta.
(*) De la redacción de Perfil.com