Gustavo Prellezo, uno de los asesinos de José Luis Cabezas, fue habilitado para ejercer como abogado, tras haber obtenido su título luego de estudiar en la cárcel mientras cumplía la condena por el crimen cometido en 1997. El Colegio de Abogados lo había excluido de la matrícula, pero la Cámara en lo Contencioso Administrativo revocó la decisión.
"Escándalo: un asesino suelto en Tribunales", anunció vía Twitter Gabriel Michi, el periodista que cubría junto al fotógrafo la temporada de verano en Pinamar para Noticias, momento en el que ocurrió el crimen luego de que Cabezas lograra retratar al empresario Alfredo Yabrán.
Tras conocerse las novedades sobre el expolicía, Michi precisó: "La Justicia habilitó al asesino de José Luis Cabezas, Gustavo Prellezo, para que ejerza como abogado, después de rechazar la decisión del Comité de Disciplina del Colegio Público de la Abogacía de la Capital Federal (CPACF) de quitarle la matrícula por esconder su condena".
"La Cámara en los Contencioso Administrativo Federal permitirá de esta manera que un criminal que fue condenado a perpetua y estaba inhabilitado por los artículos 44 y 45 de la Ley 23187 pueda ejercer como abogado, algo que le habían denegado en Provincia y CABA. Un escándalo", añadió el periodista.
En este contexto, calificó la decisión de la Justicia como "una nueva afrenta a la memoria de José Luis Cabezas, a su familia y a toda la sociedad argentinas".
"Esperemos que la Corte Suprema haga lugar al recurso extraordinario que seguramente presentará el CPACF", añadió Michi junto a una foto del fotógrafo con la leyenda No se olviden de Cabezas y advirtió: "Mientras tanto, cuidado porque hay un asesino suelto en Tribunales".
El 8 de enero de 2017 Prellezo salió en libertad condicional por decisión de la Cámara de Apelaciones de Dolores. A los dos meses se recibió de abogado y una semana después el Colegio de Abogados de Quilmes le retiró a matrícula que le permitía trabajar en el fuero penal.
La historia de la foto de Yabrán que le costó la vida a José Luis Cabezas
Sin embargo, a fines de 2019 la familia del fotógrafo denunció que el ex policía estaba ejerciendo matriculado desde agosto de 2018, incluso bajo el régimen de libertad condicional. Motivo por el que reclamaron que este no ejerciera hasta que cumpliera con el total de la sentencia a prisión perpetua que había recibido, al cual terminaba a fines de 2021.
Acto seguido, el Tribunal de Disciplina del Colegio Público de Abogados de la Capital Federal lo excluyó de la matrícula en noviembre de 2020, aunque el asesino de Cabezas recuperó su libertad el año pasado y ahora la Justicia lo habilitó a poder ejercer como abogado.
El crimen de José Luis Cabezas
José Luis Cabezas fue asesinado el 25 de enero de 1997 tras asistir a una fiesta en la casa del empresario postal Oscar Andreani, en Pinamar, lugar donde se encontraba realizando la cobertura periodística de la temporada para Noticias en compañía del periodista Gabriel Machi.
A la mañana siguiente de aquella noche, el cuerpo de Cabezas apareció adentro de un Ford Fiesta quemado en una cava a las afueras de la localidad balnearia. Su cadáver tenía las manos esposadas y dos proyectiles calibre 32 alojados en la cavidad craneana.
Aproximadamente un año antes de su muerte, el fotógrafo había tomarle una foto al empresario Alfredo Yabrán, cuya figura era desconocida.
La Justicia determinó que la víctima fue capturada por "la banda de los Horneros", en un operativo clandestino supervisado por los policías Aníbal Luna y Sergio Camaratta, y luego fue conducida hasta el lugar donde Gustavo Prellezo lo asesinó de dos disparos en la cabeza e incendió su cuerpo.
Si bien se señaló a Yabrán como el autor intelectual "mediato" del crimen, el empresario no llegó a ser juzgado ya que se suicidó en 1998. A su vez, su jefe de custodia, el exsargento Gregorio Ríos, fue señalado como el autor "inmediato". Prellezo, Luna y Camaratta fueron encontrados culpables y recibieron cadena perpetua.
Todos recuperaron la libertad, mientras que Camaratta murió en 2015 por una enfermedad.
AS/LT