POLITICA
En respuesta a las denuncias sobre un posible fraude

La Justicia reclamó al Gobierno elecciones transparentes

La Cámara Electoral Nacional le solicitó al Gobierno que tome medidas concretas para facilitar la fiscalización por parte de los partidos. En especial, apuntan al escrutinio provisional delMinisterio del Interior.

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A menos de un mes de las elecciones presidenciales, la Cámara Nacional Electoral dio lugar a los reclamos de la oposición y le solicitó al Gobierno de Néstor Kirchner que tome medidas concretas para facilitar las tareas de fiscalización por parte de los partidos políticos. En especial, el pedido apunta al escrutinio provisional que el Ministerio del Interior realizará la misma noche de los comicios del 28 de octubre.

Haciéndose eco de los pedidos de transparencia, la Cámara instó al Gobierno a autorizar la presencia en el centro de carga de datos de, como mínimo, "un fiscal representante por cada fórmula presidencial", informó hoy el diario La Nación.

También solicitó tener rápido conocimiento del programa informático que se utilizará para el recuento de votos y un informe detallado sobre cómo se llevará a cabo esa tarea, al tiempo que recordó que deben depositarse a tiempo los fondos de campaña que corresponden a cada partido.

La decisión de la Cámara llegan después que los principales dirigentes de la oposición reclamaran mayores medidas de control y fiscalización en las elecciones presidenciales del 28 de octubre.

La preocupación central de los jueces pasaría por el escrutinio provisional que realizará el Ministerio del Interior inmediatamente después que hayan finalizado los comicios, debido a que esos datos "suelen formar un estado de opinión acerca de quienes resultaron electos en los comicios que es difícilmente reversible con la comunicación del escrutinio definitivo".

En ese sentido, la Cámara pidió que se informe " el porcentaje de votos computados que se tomará como base para la divulgación de los primeros resultados".

Sin embargo, uno de los temas que quedaron pendientes fue el que también era uno de los pedidos centrales de la oposición: la presencia de veedores internacionales para controlar el normal desarrollo de las elecciones.