La ola de embarazos en el ámbito político

¿Una epidemia? No se sabe si tanto, pero los embarazos en el ámbito político al menos se convirtieron en una ola, y las noticias de futuros padres no dejan de sorprender. La dulce espera de Mauricio Macri y Juliana Awada, las intenciones de Daniel Scioli y Karina Rabolini, la panza de Carla Bruni que hizo aumentar la popularidad del presidente francés, Nicolás Sarkozy, en medio de la campaña para su reelección y ahora, la Presidenta anunció que su hijo, Máximo Kirchner, también será papá.

Parece que las buenas nuevas efectivamente sirven en épocas electorales. Como el caso de Sarkozy, el jefe de Gobierno porteño y su mujer también hicieron conocer la feliz noticia en medio de la campaña para su reelección. Y vaya que le fue bien: el domingo pasado obtuvo el 47% de los votos, casi 20 puntos más que su rival kirchnerista, Daniel Filmus.

A pocos días del simbronazo que esta derrota significó para la Casa Rosada, la presidenta Cristina Fernádez de Kirchner salió a contar por Twitter que será abuela, y también tía abuela. Es que además de que su hijo Máximo espere un bebé con su novia María Rocío García, la hija de Alicia Kirchner, Natalia, también está embarazada de 5 meses. ¿La noticia influirá en las elecciones porteñas de fin de mes?

Quienes también andan en búsqueda de un nuevo integrante en la familia son Scioli y Rabolini. Ella anunció que iniciaron un tratamiento porque su prioridad este año "es quedar embarazada". Coincidencia o no, este año el gobernador bonaerense también busca su reelección, y se sabe que (aunque por lo pronto suspendida) su aspiración sigue siendo la Rosada. Habrá que ver cómo sigue el panorama.

Otro de los casos más recordados es el de Tony Blair, el ex primer ministro británico, que cuando nació su tercer hijo, Leo, se tomó licencia por paternidad en mayo de 2000 y se alejó por un tiempo de sus funciones para estar junto al pequeño y su esposa.