La interna del PRO vivió un capítulo más ayer por la tarde. Con una hora y media de retraso (esperaron a que terminara la cadena nacional de la presidenta Cristina Fernández de Kirchner) Gabriela Michetti lanzó su candidatura por la jefatura de Gobierno de la Ciudad. La senadora fue la única oradora, aunque invitó a subir al escenario a sus principales apoyos: los ministros Guillermo Montenegro (Seguridad), Daniel Chaín (Desarrollo Urbano) y Hernán Lombardi (Cultura).
Fue breve, con un discurso del estilo PRO, en el que evitó las chicanas contra su principal rival, Horacio Rodríguez Larreta, y hasta contó con la presencia de otro precandidato: Cristian Ritondo. Si bien el vicepresidente de la Legislatura porteña aún está en carrera, tendría acordado bajarse a pocas semanas de las internas para apoyar al jefe de gabinete y dar un golpe de efecto en el partido.
El jefe de gobierno y precandidato presidencial Mauricio Macri no asistió, a pesar de haber sido invitado personalmente por Michetti. Macri hizo público su apoyo a Larreta y aún sigue molesto por la negativa de "Gaby" para ser su compañera de fórmula. "Mauricio Presidente, Gabriela en la Ciudad", cantaron los fieles que llenaron un salón en Barracas. Aplaudió con énfasis el diputado nacional Federico Pinedo y el porteño Oscar Moscariello. El líder de PDP anunciará hoy a las 18 que su partido "tomó la decisión de respaldar 100% la candidatura" de Michetti.
En el PRO todos miran como próxima fecha clave el 15 de abril. Ese día habrá un debate en TN entre los tres precandidatos. Por esa razón se la vio muy activa a Michetti esta semana, en reuniones con ministros para conocer detalles de la gestión. Se sabe que Larreta buscará confrontar su perfil de gestión contra el legislativo de la exvicejefa.
Todo puede pasar. Este fin de semana los ojos estarán puestos en la convención radical de Gualeguaychú. Un total de 337 convencionales votarán la estrategia de la UCR: las alianzas y el candidato. Tanto Ernesto Sanz como Julio Cobos aseguran tener los votos necesarios para resultar ganadores. Lo cierto es que a menos de 24 horas es imposible saberlo. Massa y Macri operan personalmente para obtener un resultado favorable en pos de una alianza con sus paartidos. A pesar de la crisis por la que pasa el centenario partido político, aún conserva una gran estructura en todo el país, cientos de intendentes y un gobernador. Además, es la primera fuerza opositora en el Congreso y resulta clave a la hora de la fiscalización nacional.
¿Hay posibilidades de fractura tras el resultado en Entre Ríos? Si bien nadie lo dice públicamente, es una posibilidad, teniendo en cuenta el tumultoso andar de los últimos años. Además de la estrategia electoral, hay una fuerte disputa por el control del partido entre Sanz y Gerardo Morales, quien busca ir con Massa en Jujuy para obtener la gobernación. A nivel provincial tendrá el visto bueno, pero no a nivel nacional. Mañana desde el mediodía comenzará la pulseada.Dos en carrera. "Aplicamos el correctivo y volvemos a la filosofía zen", dijo a Perfil.com uno de los principales operadores del gobernador bonaerense, Daniel Scioli, en la campaña. Desde ese espacio bajaron el tono de las críticas hacia el ministro de Transporte, Florencio Randazzo, tras el “carpetazo” de Alberto Pérez en Twitter.
Dentro del FPV quedaron en carrera Scioli y Randazzo, a pesar de que el gobernador de Entre Ríos, Sergio Urribarri, insista en su precandidatura.
Un tapado. La falta de rival interno le causa un dolor de cabeza al líder del Frente Renovador, Sergio Massa, que observa cómo la pelea se polariza entre Scioli y Macri. Por lo pronto, apostó al economista Guillermo Nielsen como su candidato en la Ciudad y busca volver al centro del ring. Salió con los tapones de punta al hablar del Juego y Ganancias.
(*) De la redacción de Perfil.com.
