La última llamada que habría realizado Alberto Nisman aparece registrada a las 20.37 del sábado 17 de enero, indicaron a PERFIL fuentes cercanas a la jueza Sandra Arroyo Salgado. En los últimos días, trascendieron llamados posteriores a ese horario desde el teléfono del fiscal a su hermana y a su tía, pero la querella dijo que “existe una confusión”.
Días atrás, Clarín dio a conocer un documento en el que se establecía que el último llamado de Nisman fue a las 23.07 a su tía Lidia Garfunkel y que la comunicación se extendió por 15 segundos. “Antes –publicó ese diario– Nisman marcó el celular de su hermana Sandra. A ella la llamó desde su teléfono fijo a las 22.52 y la comunicación duró 54 segundos”.
Los informantes señalaron que, en realidad, se trató de llamadas realizadas el domingo y que fue la madre del fiscal, Sara Garfunkel, quien marcó los números de su hija y hermana desde el teléfono de línea para comunicarles lo que había ocurrido en el departamento.
Tal como reveló PERFIL, el domingo 18 de enero, Nisman no realizó ninguna llamada telefónica durante el día. Una ausencia de actividad que contrasta con el intenso intercambio telefónico que había tenido Nisman los días anteriores.
Las computadoras y los equipos de comunicación secuestrados en el departamento de Le Parc la madrugada del último 19 de enero permanecieron cerrados durante semanas en los gabinetes del Departamento de Apoyo Técnico de la Policía Federal. Pese a que la fiscal Viviana Fein había advertido desde el primer día que el análisis sería clave en el esclarecimiento del caso, debió esperar a que la querella dispusiera los peritos de parte y eso atrasó una pericia clave para el caso.
Cuando Arroyo Salgado incluyó al forense informático Gustavo Presman, la pericia comenzó y, al igual que la autopsia y sus estudios complementarios, es objeto de controversias entre la defensa, la querella y los técnicos oficiales.
Luego de que la ex mujer de Nisman anunció que su equipo de peritos había determinado que la data de muerte ubicaba a Diego Lagomarsino en la escena de un presunto crimen, trascendieron datos relacionados con las pericias informáticas que contradicen esa hipótesis.
El abogado de Lagomarsino, Maximiliano Rusconi, se quejó de la interrupción de las pericias informáticas. Según la defensa, los peritos habían detectado que la computadora del fiscal se utilizó de forma “local” el domingo cerca de las 8 de la mañana, pero admitió a PERFIL que este dato “no consta en un acta, sino en un registro fílmico de la notebook de Nisman”. Este viernes, el abogado pidió que se preserve esa información.