El presidente Javier Milei despliega un estilo inédito en sus giras por el exterior. Un estilo que ningún otro jefe de Estado había tenido.
Se trata de la combinación de la agenda institucional, en el que se mezclan otros presidentes y mandatarios con funcionarios de alto rango, encuentros y cumbres vinculados con los negocios y aspectos comerciales, y eventos relacionados con su vida espiritual.
En los primeros cuatro meses de mandato esta ha sido la tónica de las giras que desplegó el Presidente.
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Es por eso que esta última gira por EE.UU. que está desarrollando, el único encuentro institucional fue el que mantuvo con el titular del BID (Banco Interamericano de Desarrollo), Ilan Goldfajn, acompañado por el embajador designado, Gerardo Werthein, y gerentes del organismo.
Fuera de eso, Milei participó de la distinción que se le otorgó como Embajador de la Luz, por la congregación Jabad Lubavitch, consolidando su lazo con la fe judía. No en vano es su líder espiritual, Axel Wahnish, embajador en Israel y quien lo introdujo al estudio del Talmud, es uno de los que también lo acompañan por la gira.
El Presidente tiene un estilo inédito para sus viajes internacionales y en su agenda
También se reunió con empresarios que mantienen perfiles innovadores y que son incluso activos en las redes sociales y a la hora de opinar sobre la realidad: tal los casos de Martín Migoya y del excéntrico Elon Musk.
El estilo de Milei combina diversos ejes, pero además retoma la idea de una diplomacia presidencialista en la que el comando de las relaciones exteriores queda a su cargo, mucho más si se trata de aspectos que son de su interés, como la relación con EE.UU. e Israel.
A partir del lunes estará en Dinamarca, en donde se firmará el convenio para avanzar en la adquisición de aviones F16 y de armamento con financiamiento de EE.UU., tal como contó este diario.
Lo protocolar del evento no evitará que Milei se suba a un avión de combate, como copiloto. Según confirmó Presidencia esta semana, el jefe de Estado libertario se realizó los chequeos médicos pertinentes para subirse al avión. Otro hecho inédito en la historia.
