Los familiares del fallecido represor de la ESMA, Héctor Febres, fueron indagados por la jueza que investiga la muerte por envenenamiento, Sandra Arroyo Salgado, en relación a una "última cena" que habrían celebrado el domingo en dependencias de Prefectura.
Así lo confirmaron a Télam fuentes judiciales, quienes indicaron que tras la declaración de Stella Marís Guevara y sus hijos Héctor Ariel y Sonia Marcela, luego sería el turno de los prefectos que permanecen detenidos desde el pasado lunes, cuando se conoció la muerte del ex represor por envenenamiento.
Ambos efectivos de Prefectura habrían permitido a la familia cenar con su custodiado, lo cual no está contemplado en el régimen ordinario de visitas y configuraría una falta grave con posibles consecuencias penales.
El abogado de la familia Febres, Martín Orozco, dijo esta tarde que resulta "inverosímil" que sus defendidos "hayan participado" en un posible "suicidio" o "crimen" del ex represor, y se quejó porque sus defendidos fueron detenidos e incomunicados "apenas hallado el cadáver de su padre, sin siquiera poder hacer el luto y sin entender por qué".
Asimismo, Orozco calificó como una "mentira infame" las especulaciones acerca de la existencia un móvil económico en el presunto homicidio del represor y aclaró que Febres no tenía otro seguro de vida más que "el que le da la Prefectura".
Febres murió envenenado en su lugar de detención, aparentemente con cianuro, días antes de conocerse la sentencia del juicio que se le seguía por crímenes de lesa humanidad.Su esposa, sus dos hijos y otras tres personas (su yerno y dos prefectos) fueron detenidas por la jueza Arroyo Salgado, quien determinó que Febres había cenado con ellos en la dependencia de Prefectura en la que estaba alojado, horas antes de que falleciera aparentemente por ingerir cianuro.
Fuente: DyN y Télam
