Desde San Juan
Las urgencias económicas y la necesidad de cambiar de estilo luego de la derrota electoral posicionan a la mayoría de los gobernadores peronistas abiertos al diálogo con Mauricio Macri. Esta nueva liga que se unió para reclamar por la coparticipación de los recursos también apuesta a la unidad partidaria de cara al próximo congreso del Partido Justicialista (PJ), programado para el 24 de febrero.
“Voy a seguir siendo peronista, no me planteo un pase a otro frente político, y eso no invalida que uno pueda sentarse a conversar con quien hoy representa al gobierno nacional”, cuenta en diálogo con PERFIL el gobernador de San Juan, Sergio Uñac, quien el viernes recibió a Macri en su provincia.
—¿Cómo se llega a armar esta nueva liga de gobernadores?
—La decisión de la Corte Suprema por la que se restituían fondos a tres provincias y un simple decreto que modificó la distribución y benefició sólo a la Ciudad de Buenos Aires fueron hechos concretos que nos llevaron a juntarnos. No podía haber cuatro distritos beneficiados y veinte perjudicados; si hay plata para cuatro provincias que haya plata para todas, pero siempre poniendo el diálogo como denominador común.
—El peronismo se divide entre los que creen que hay que darle tiempo al Gobierno y quienes buscan una fuerte oposición a sus políticas desde el principio. ¿En cuál se ubica usted?
—Hay un período en el que el Gobierno debe generar los primeros hechos para acentuarse sobre una base sólida. Nosotros somos respetuosos de ese momento porque también la sociedad lo necesita. Apostamos al diálogo y somos prudentes de los tiempos, pero queremos que fruto de este diálogo empecemos a cosechar acciones concretas. Me quedo con que el peronismo debe generar una oposición constructiva tratando de colaborar con el Gobierno en las cosas que le hagan bien a la sociedad argentina y sobre esa base presentar para 2017 y 2019 una propuesta superadora, pero siempre pensando que al Gobierno le debe ir bien porque a la gente le debe ir bien.
—Parece que tienen más diálogo con este gobierno que con el kirchnerismo…
—A San Juan le fue bien y hubo un diálogo fluido. Lo que se podía esperar ahora es que, como nosotros éramos de un frente político y el gobierno nacional de otro, podíamos tener mala relación. Los gobernadores nunca vamos a romper el diálogo, pero cada uno va a seguir siendo del gobierno que es.
—El 24 de febrero en el Congreso del PJ se empezará a discutir la renovación de autoridades. ¿Usted se inclina por una lista de unidad encabezada por José Luis Gioja?
—Puedo tener algún interés porque soy amigo de José Luis Gioja; él representa hoy la síntesis de lo que hace falta para poder conducir al Partido Justicialista en un proceso de transición hacia las próximas elecciones. Pero no vamos con una postura cerrada al congreso, vamos a dialogar y escuchar a todos.
—Esta unidad no se pudo dar en el Congreso, donde se rompió el bloque ¿Está de acuerdo con que en la Cámara de Diputados haya dos bloques?
—Hubiese sido mucho mejor que se quedaran, los debates los tenemos que dar desde adentro y las diferencias las debemos zanjar con el diálogo, pero no hay que prejuzgar a los compañeros que se fueron. Más que juzgarlos habrá que dialogar con ellos entendiendo que son peronistas y que nos vamos a volver a juntar. Debemos abrirles las puertas a todos y no hay que proscribir a nadie.