El presidente de Subterráneos de Buenos Aires (SBASE) -empresa propiedad del Gobierno porteño-, Juan Pablo Piccardo, confirmó este miércoles que se podría paralizar "entre dos y tres meses" el servicio de la línea A que une Plaza de Mayo con la estación Carabobo, en el barrio de Flores, si se decide el reemplazo total de los vagones más antiguos, dato que fue confirmado por el jefe de Gobierno porteño, Mauricio Macri.
Piccardo sostuvo que esas formaciones, que tienen unos cien años y son de madera en su interior, necesitan ser "renovados" porque por la tecnología que poseen "ya no son aptos para circular" y afirmó que "por la seguridad de la gente y operativa, no se pueden tomar riesgos".
En declaraciones televisivas, el funcionario dijo que a partir de la semana próxima cuando el Gobierno porteño se hará cargo de la red de subterráneos se informará la determinación que se adoptará, garantizó que "se está pensando en minimizar el impacto en la gente" y dijo que, en caso de paralización, se pondrán "formas alternativas de transporte para paliar" la situación.
A su vez, detalló a FM Imagina que "la decisión es retirar de circulación 95 vagones de madera". "Hay que sacar todos los coches viejos y colocar todas las formaciones nuevas juntas. Si hay un momento para hacerlo es enero y febrero, y quizás algunos días de marzo, porque hay menos gente. La semana que viene vamos a comunicar la decisión. Vamos a privilegiar la seguridad. En las líneas C y E hay que cambiar las vías pero en ese caso sí se puede hacer de noche", explicó el ingeniero.
El jefe de Gobierno porteño, Mauricio Macri, confirmó esta mañana que la línea A de subte dejará de prestar servicio a partir de la "primera quincena de enero" por un plazo que puede llegar hasta los 60 días para permitir la adaptación de los nuevos coches que reemplazarán las actuales unidades que tienen unos cien años. El mandatario comunal dijo que esta medida tiene por finalidad "mejorar la calidad y la seguridad del servicio" y destacó que la adecuación técnica de la línea llevará "un mínimo de 15 días y un máximo de un mes y medio, dos meses".
Macri efectuó estas declaraciones a la prensa luego de supervisar las obras del nuevo Centro Verde del barrio de Núñez destinadas a la separación y clasificación de los residuos.
Por su parte, el sindicato mayoritario del subte y el premetro (AGTSYP) acusó al gobierno porteño de querer "aplicar un shock publicitario" cuando se haga cargo de la administración del servicio desde el 1 de enero y advirtió que parar la línea A para renovar los vagones "sería un disparate".
Contra los "dos o tres meses" calculados por la administración de Mauricio Macri, el gremio advirtió que "una semana" sin funcionamiento "ya sería un disparate" para poner a punto el servicio en ese sector, donde corren formaciones de más de cien años. Además Agtsyp reclamó al gobierno capitalino que "notifique" al sindicato "el presunto plan de obras de manera urgente".
"Buscan aplicar un shock publicitario porque el señalamiento, la parte eléctrica y las vías fueron renovados en 2008. Además, hace cinco años, se remodelaron estaciones pero, si quisieran avanzar en ese sentido, se podría hacer eso con las formaciones en funcionamiento. Asimismo, sacar toda la flota y colocar una nueva demanda 24 horas", dijo a DyN el jefe de los "metrodelegados", Roberto Pianelli.
Opiniones encontradas. Más temprano, el legislador del PRO Jorge Garayalde explicó que aún no habían tomado el control del servicio por lo que se les hace "imposible hacer previsiones". "Es una locura, nadie puede cerrar el subte por tres meses. La idea que tenemos es que vamos a revisar qué tenemos y qué vamos a hacer y cuánto tiempo necesitamos para cambiar los vagones", aclaró Garayalde en diálogo con Radio 10. "Es cualquier cosa; nosotros no hemos hecho ninguna declaración de lo que vamos a hacer", lanzó.
En tanto, el jefe de Gabinete porteño Horacio Rodríguez Larreta había señalado que la Ciudad recién va a decidir cómo va a reemplazar los vagones en la línea A cuando el 1º de enero se haga cargo del subte. "Eso es algo que hay que ver, no hemos decidido nada aún", dijo Larreta sobre la posibilidad de que el servicio se interrumpa durante tres meses.
