Macri recibió con alivio los primeros datos de la autopsia

Los primeros datos de la autopsia sobre el cuerpo de Santiago Maldonado produjeron alivio y tranquilidad en el seno del gobierno nacional. En particular, la ausencia de signos de violencia, menos aún presencia de balas, que permitan asegurar que fue la Gendarmería la que terminó con la vida del joven.

El presidente Mauricio Macri les transmitió “tranquilidad” a sus principales asesores y confió que su administración había sido “coherente” desde el comienzo del caso. El mandatario estuvo el viernes, y parte del día de ayer, en comunicación con el jefe de Gabinete, Marcos Peña, y con los ministros de Justicia, Germán Garavano –quien ofició de vocero oficial– y de Seguridad, Patricia Bullrich, intercambiando información y visiones sobre el tema. Los tres funcionarios, junto al titular de la AFI, Gustavo Arribas, conformaron una suerte de “comité de crisis” para trabajar en el caso. De hecho, se reunieron el jueves por la mañana en el primer piso de la Casa Rosada cuando aún no había certezas, por parte de la Justicia, de que el cuerpo encontrado era efectivamente el de Santiago Maldonado. “Había caminos más fáciles, como pasar a disponibilidad a los gendarmes. Nos hubieran agujereado”, le dijo Bullrich a su círculo íntimo, luego de haber sido objeto de pedidos de renuncia desde hace dos meses por parte de la oposición.
En este contexto, según fuentes oficiales, las pericias sobre el cuerpo con los peritos de la querella y de la familia fueron determinantes. “La autopsia desbarata muchas cosas, sobre todo la desaparición forzada. Todo el esquema represivo, supuestamente organizado desde la máxima autoridad del Estado para abajo, no tiene mucho sentido sostenerlo desde que se conocieron los primeros resultados de la autopsia”, explicó a PERFIL una de las fuentes de trato cotidiano con el Presidente. “Todo indica que Maldonado se ahogó”, agregó.

Otra fuente, con acceso a la investigación, fue más allá: “Armaron pruebas, testigos falsos, inventaron un relato. Y no nos movimos de nuestra verdad. Llegamos a un desenlace no deseado, pero que no coloca al Estado en el lugar de la represión”.

El viernes, tras conocerse la confirmación de que el cuerpo hallado en el río Chubut era el de Maldonado, Macri dialogó brevemente con Stella Maris Peloso, la madre de Santiago (quien se hacía llamar “el Brujo” Peloso). El jefe de Estado le contó que él había vivido el dolor de su padre Franco cuando falleció Sandra Macri, la hija mayor del clan. La madre del joven le pidió que haga “todo lo posible para encontrar a los culpables” de la muerte de Santiago. Macri le prometió que lo haría.

Paralelamente, en la Casa Rosada ya empiezan a visualizar las consecuencias que podría tener en el arco político y, en particular, con las declaraciones presuntamente truchas de los mapuches. “En el medio los encubrimientos de los mapuches y el aprovechamiento político del kirchnerismo, sobre todo. En ese sentido fue esclarecedor. Los que hablaron de un desaparecido de Macri quedaron pedaleando en el aire”, opinó un funcionario de Balcarce 50.

El Presidente concurrirá hoy a votar al mediodía en la escuela 16 “Wenceslao Posse” en Palermo. La misma donde vota desde hace años. Seguramente llevará facturas o sándwiches de miga para las autoridades de mesa. Sobre el caso Maldonado se limitará a reiterar sus condolencias a la familia.