Mauricio Macri busca retomar la iniciativa política y liderar a la oposición al Gobierno de Alberto Fernández. Tras estar alejado durante fines de diciembre y enero de la conversación pública, el expresidente comienza a incrementar su participación y hoy encabezó una cumbre de la mesa nacional del PRO, que se llevó a cabo para "analizar la coyuntura nacional" y determinar "los pasos a seguir".
Del encuentro participaron Macri, el jefe de Gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta, la ex gobernadora bonaerense María Eugenia Vidal, la ex ministra de Seguridad y designada presidenta del PRO, Patricia Bullrich, y el ex senador y ex candidato a vicepresidente, Miguel Ángel Pichetto.
También concurrieron el senador y presidente saliente del partido, Humberto Schiavoni, y el diputado nacional y titular del bloque PRO, Cristian Ritondo.
La reunión comenzó a las 15:30 y se llevó a cabo en las oficinas que Macri montó en Vicente López, en Avenida del Libertador al 2700, a pocas cuadras de la Quinta de Olivos.
Al finalizar el mitín político, Bullrich sostuvo que fue "una reunión donde la mesa del PRO junto a Miguel Pichetto y Mauricio Macri trabajó una serie de temas importantes", que el espacio considera "que son los temas de debate" actuales.
Mauricio Macri vuelve a la escena política y reorganiza la mesa chica del PRO
Entre ellos mencionó "la necesidad de cuidar fuertemente la República y la Justicia" y, al respecto, la ex ministra destacó que "algunas de las medidas que se han tomado lesionan la independencia de la Justicia".
"Intentar auditar el sistema de protección de testigos protegidos por los acuerdos que hizo la Justicia es una barrabasada, un intento más por eludir la Justicia", señaló Bullrich en declaraciones a los periodistas.
Por su parte, Pichetto, quien también ofició de vocero de la reunión del PRO, dijo que a Macri lo vio "muy bien, con un gran interés sobre los temas del país, con una visión de prudencia y responsabilidad y siguiendo atentamente todos los acontecimientos".
Se trató de uno de los primeros encuentros del ex mandatario con los principales dirigentes del PRO, a poco más de 60 días de abandonar la Casa Rosada.
Durante la jornada de ayer, Macri había a un nene de 4 años con cáncer terminal que quería conocerlo antes de morir en el Hospital Elizalde, donde le hizo un particular pedido: comerse un pancho con el ex mandatario y sacarse una foto con la máscara del Hombre Araña.
JPA CP