Las organizaciones nucleadas en la Unidad Piquetera marcharon este miércoles por avenida de Mayo hacia el Palacio de Hacienda para pedir una reunión con el flamante "superministro" de Economía, Sergio Massa. Nuevamente las protestas derivaron en un caos de tránsito en el microcentro porteño. Los referentes de los movimientos sociales fueron recibidos finalmente por el director de Coordinación Institucional del Palacio de Hacienda, Lautaro Vicario, sin encontrar "las soluciones esperadas". En el marco de una asamblea convocada a última hora por los dirigentes de Unidad Piquetera, tomaron la decisión de quedarse a pasar la noche frente a la Casa Rosada para seguir presionando al gobierno de Alberto Fernández.
En las condiciones descritas, no se descarta que el acampe se extienda por 24, 48 o 72 horas, ya que los manifestantes entienden que sus "reclamos no fueron escuchados" en las reuniones que mantuvieron este miércoles en los ministerios de Economía y Desarrollo Social.
“La respuesta del Ministerio de Economía fue cero”, reveló el líder del Polo Obrero, Eduardo Belliboni, tras haber mantenido un encuentro con el director de asuntos institucionales del Ministerio de Economía.
En sintonía con dichas declaraciones, Mónica Sulle, la referente del MST "Teresa Vive", comentó que el encuentro con el funcionario de la cartera de Economía "simplemente sirvió para que digan excusas y no aporten ninguna solución", precisó la dirigente social a Noticias Argentinas.
Si bien durante la jornada hubo contactos con el Ministerio de Desarrollo Social y se propuso una reunión "a agenda abierta" con el ministro Juan Zabaleta para el próximo 24 de agosto, las organizaciones sociales argumentaron que "no era un motivo de peso para levantar el acampe".
"Necesitamos respuestas, por eso nos quedamos acá. Porque Massa tiene tiempo para todo, se va a reunir con la CGT y los empresarios para discutir el problema de los precios", apuntó Belliboni, quien anticipó que mañana definirán en una nueva asamblea si levantan el acampe o no.
Los reclamos de la Unidad Piquetera
Los manifestantes exigieron un aumento de 105.000 pesos del Salario Mínimo y un bono para determinados sectores. Belliboni señaló que buscan "un refuerzo de ingreso de 20.000 pesos para jubilados, monotributistas, precarizados y beneficiarios del programa Potenciar Trabajo y la Tarjeta Alimentar".
Además, en declaraciones a Télam, agregó: "También un plan de obras públicas con trabajo genuino y la universalización de los programas sociales".
La concentración piquetera se dio en las esquinas de Avenida de Mayo y Avenida 9 de Julio, la zona del Obelisco y las avenidas Belgrano y 9 de Julio, lo que generó una congestión vehicular y demoras de varios minutos. El Metrobus funciona con normalidad.
En el transcurso de la jornada tuvieron lugar asambleas, actividades culturales y callejeras.
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A través de su cuenta de Twitter, Belliboni había anunciado que la Unidad Piquetera, que también incluye al MST Teresa Vive, el Movimiento Barrios de Pie, y el Frente Darío Santillán, "permanecerá en la Plaza de Mayo y en todas las plazas del país para que nos atienda Massa", tuiteó.
“El ajuste está llegando a la comida"
El dirigente del Polo Obrero había comunicado que los protestantes estaban dispuestos a realizar una "rotación de 24 horas" en el lugar. "Como a Silvina Batakis, a Massa le presentamos un pedido de audiencia apenas asumió. Como no nos contestó, permaneceremos en la plaza del pueblo”, aseguró Belliboni.
“El ajuste está llegando a la comida que no viene a los comedores populares, a los compañeros que están desocupados y ni siquiera tienen un programa social que los ayude a poner un plato de comida en la mesa”, afirmaron las organizaciones en un duro comunicado.
Por otro lado, reclamaron más comida para los comedores y merenderos populares, y exigieron “que se cumpla con la entrega de las herramientas y maquinarias prometidas para más de 3.000 emprendimientos”.
Dentro de las actividades culturales, anunciaron la participación de “artistas solidarios” como el grupo de rock Las Manos de Filippi, tenores del Teatro Colón y un grupo de “raperos sorpresa”.
FP / MCP