El Gobierno nacional protagonizó un nuevo cruce con el mandatario porteño Mauricio Macri en medio del escenario electoral, pero en esta oportunidad las diferencias se produjeron por una serie de acusaciones cruzadas por la demora de las obras en la Autopista Illia. Macri renovó sus peticiones al gobierno de Cristina Fernández para que libere zonas que impiden la ampliación de la autovía y advirtió que "lamentablemente, estos son los casos en que la política perjudica a la Argentina".
"Lamentablemente, estos son los casos en que la política perjudica a la Argentina. Por eso quiero decirle a la señora presidenta Cristina Fernández de Kirchner que entre la política y la gente nosotros elegimos la gente", subrayó Macri en una conferencia de prensa que ofreció en Avenida Sarmiento y Costanera.
El mandatario porteño se quejó porque, según él, desde mediados del año pasado no obtiene respuesta a sus reclamos para que aplique las obras necesarias para avanzar con la extensión de la autovía. Macri consideró que la postura del Ejecutivo nacional "es una falta de respeto a la gente”. “Estamos bloqueados y no nos dejan avanzar a pesar de que existe un convenio firmado desde la época de los ex jefes de Gobierno Aníbal Ibarra y su continuador, Jorge Telerman", agregó.
El secretario de Transporte de la Nación, Juan Pablo Schiavi, replicó las críticas del mandatario porteño, lo acusó de mantener una "actitud demagógica" con fines electorales y enfatizó que hubo diálogo y reuniones con el jefe de gabinete porteño, Horacio Rodríguez Larreta, y con otros funcionarios de la Ciudad.
"No es verdad que no hay diálogo. El día que hablamos del costo de la obra (reformulada), que era de unos 200 millones de pesos se levantaron y se fueron y no los vimos más", aseguró. Remarcó que "hemos puesto la mejor buena voluntad y hemos atendido a todos los funcionarios del Gobierno de la Ciudad que han venido", pero luego calificó como "una falta de ética" la manera en la que Macri reflotó su reclamo. El funcionario nacional vinculó los planteos del mandatario porteño con fines proselitistas y advirtió: "Nosotros no hacemos obras para las elecciones".
"Que no haga payasadas porque no vamos a hacernos cargo de los fracasos de otros. Lo que hizo hoy es marketing electoral. Se me vino a la mente la imagen de la chiquita de Villa Lugano", fustigó Schiavi, refiriéndose a la campaña electoral de Macri para los anteriores comicios en la Capital Federal.
Sin embargo, Rodríguez Larreta afirmó que "Schiavi miente. Jamás hablé con él de este tema y, es más, hace más de un año que no hablo con él".
"Hoy Schiavi tiene toda la información para correr 15 metros el alambrado. No le pedimos que ponga un peso, sólo que corra el alambrado", sostuvo Rodríguez Larreta.
Fuente: DyN.