El Ejército aparece dividido frente al avance del general César Milani. Los sectores castrenses más nostálgicos están convencidos que con el ascenso del oficial al grado máximo de teniente general, el Ejército vuelve a tener un lugar en la vida política. Sin embargo, dentro de la misma fuerza, hay quienes plantean un clima de incertidumbre por las tres causas judiciales que enfrenta, dos por su accionar durante la dictadura y una por supuesto enriquecimiento ilícito.
Desde que asumió como jefe del Estado Mayor General del Ejército, Milani recorrió todas las unidades con el fin de “alinear las tropas a su mando” y ganarse el apoyo de sus subordinados. No solamente lo hizo dentro de los cuarteles, sino que también lo hizo entre el personal retirado. La imagen de Milani, en algunos sectores del ámbito castrense, comenzó a deteriorarse desde que asumió como jefe de Inteligencia, durante la gestión de Nilda Garré. Dos de los factores que determinaron esa situación fueron su incondicional alineamiento al kirchnerismo, y el hecho de haber entregado las listas de todo el personal que actuó en las áreas de inteligencia militar desde el inicio de la dictadura hasta diciembre de1983.
La campaña de Milani dentro de la “familia castrense” llegó a sumar hasta a los adherentes menos pensados. “Es la primera vez que vemos que un general convoca a oficiales y suboficiales retirados para realizar reuniones y analizar las diferentes problemáticas. Ese es un golazo”, observó un militar de la mesa chica del cuestionado general. Esa misma fuente habló del retorno de las “reuniones de camaradería” y de “los asados en los regimientos”. Un oficial en actividad, hijo de un militar retirado y sobrino de otro que se encuentra condenado por delitos de lesa humanidad, aseguró a PERFIL que el jefe del Ejército “se preocupa hasta por el último soldado”. Para otros, la reaparición de los retirados suena como una alarma sombría.
Las críticas contra el jefe del Ejército parecen ser más fuertes afuera que dentro del ámbito castrense. “Usted escuchó hablar a algún excarapintada en contra de Milani, o leyó alguna proclama de los que están detenidos en el penal de Marcos Paz. Seguramente que no”, aportó oficial retirado. Sin embargo, Cecilia Pando, vocera de los militares condenados por su accionar en la dictadura, caratuló a Milani como “un corrupto, delincuente, no querido en la institución”. El lunes, los militares cobran el aguinaldo y esperan las fechas de licencia. El primer turno es desde del 30 de este mes hasta el 28 de enero, ambas fechas inclusive. El segundo turno es desde el 30 de enero hasta el 28 febrero, inclusive. No hubo convocatorias extraordinarias. Y sobrevuela la promesa de una mejora salarial para 2014.
El ascenso de Milani fue duramente cuestionado por la oposición y organismos de Derechos Humanos por acciones que se le atribuyen durante la dictadura militar y un supuesto enriquecimiento ilícito ya en la etapa democrática.