Emilio Monzó hizo gala de su Partido del Diálogo y avanzó esta semana en múltiples conversaciones a fin de transformarse en candidato a diputado pensando en la Gobernación bonaerense en 2023.
En este marco, el jueves desayunó con Horacio Rodríguez Larreta y Diego Santilli y, por la tarde, se reunió con Facundo Manes. Monzó viene buscando su lugar en la boleta opositora, aunque se encontró con una fuerte reticencia de los intendentes del PRO a sumarlo. No solo Jorge Macri, quien jamás tuvo buen vínculo con el ex titular de la Cámara de Diputados, sino que la mayoría de los líderes territoriales desconfían de Monzó y ya presentaron sus quejas ante la chance de incorporarlo. En concreto: aseguran que los referentes territoriales del ex diputado les juegan en contra en sus distritos.
En ese marco, Larreta y Santilli, y también el jefe del bloque del PRO, Cristian Ritondo, quieren que sea parte del esquema de poder y no que juegue por afuera. De hecho, Monzó viene dialogando con el jefe comunal y hasta se reunió a solas con el “Colorado” hace tres semanas para pensar la estrategia bonaerense.
Sin embargo, el veto de los intendentes lo hace desconfiar. Por ello, el jueves por la tarde fue a visitar al neurocientífico pensando en encontrar una diagonal que le permita ser candidato y cerrar su candidatura a diputado en la boleta que encabezará Manes.
Ya Gustavo Posse, intendente de San Isidro y quien tiene un acuerdo con Monzó desde finales de 2019, tenía un pre acuerdo para ir por adentro y ser parte de la boleta de la UCR bonaerense. Producto de esa alianza, con la UCR al frente, podría ser parte de ese armado para jugar en esa boleta.
Con todo, Monzó tomó la decisión de no interferir en la interna del PRO y esperar a ver cómo avanzan los procesos de diálogo antes de tomar una decisión. Por las dudas, empezó a abrir puertas.
Mientras tanto, continúa con su propio armado en la Provincia con la ayuda del diputado nacional Sebastián García de Luca y el ex legislador provincial Marcelo Daletto. La cuestión central pasa por qué lugar tendría y en qué boleta. Por lo pronto, Nicolás Massot continúa recorriendo el municipio de Tigre, donde tiene pensando ser candidato a concejal.
¿Habrá echado a la consultora de un ex asesor de Joaquín de la Torre por los carteles que fueron un insumo de humor político ya que conformaban, todos juntos, la palabra “Menem” con las iniciales EM? De hacerlo, sería la segunda vez que lo saca de su equipo. La primera fue cuando era ministro de Gobierno porteño.
Por lo pronto, seguirá en la arena mediática. El hecho de que Mauricio Macri esté alejado del cierre de listas le provoca una sonrisa. Hace un año y medio que no hablan.
