El periodista y médico neurólogo Nelson Castro reveló a Perfil.com una serie de informaciones que levantan más sospechas sobre el sorpresivo cambio en el diagnóstico de la Presidenta Cristina Fernández de Kirchner, dado a conocer el sábado, con el parte sobre su alta médica: los profesionales del Hospital Austral, donde fue intervenida, dudaron antes de la operación que la mandataria tuviera cáncer, y luego de la cirugía quisieron dar explicaciones, pero la Unidad Médica Presidencial (UMP) se lo impidió.
"Está confirmado que ya el jueves había todo un rumor que al final no había un cáncer y nadie se animó a decirlo. El sábado, concientes de que esto iba a explotar, los médicos de la Universidad Austral pidieron dar una conferencia de prensa para dar las explicaciones del caso al tratarse de la Presidenta, pero la UMP se lo negó", señaló el columnista del diario PERFIL.
Tal como lo mencionó Castro en su columna del sábado, el equipo médico ya sabía que "había alguna duda", pero "nadie se animaba a decir nada y por eso pasó lo que pasó". De acuerdo a fuentes del hospital citadas por el periodista, una profesional del Austral vio los "tacos", las muestras de la biopsia, y dijo: "Yo no hubiese puesto ese diagnóstico tan categórico. Tengo dudas".
Castro advirtió otra inconsistencia de la versión oficial: "Los cirujanos extirparon la pieza directamenre y dieron por descontado que era un cáncer. Se extirpó la pieza desde el vamos, no porque tuvieran la duda, como ayer dijo la UMP. Se trabajó con la idea de que debían extirparlo. No era que debían confirmar o no la duda", insistió el periodista.
¿Mala praxis?. Para el periodista, "llama la atención" que no se hiciera una biopsia por congelación. "Hubiera sido interesante ver lo que pasaba. Se le sacó la pieza directamente y eso generó en la comunidad patológica alguna inquietud o sospecha en cuanto al procedimiento. Es un dato novedoso porque, en general, la biopsia por congelación se suele hacer en estos casos", explicó.
"No se sabe por qué no se le efectúo ese procedimiento", analizó Castro. Si se hacía un estudio uno o dos días más, la Presidenta iba a ir al quirófano con más certezas", opinó.
Para el neurólogo, en síntesis, el caso "estuvo medicamente mal manejado". En su opinión, "los médicos que vieron los análisis del Diagnóstico Maipú son competentes con experiencia, pero son patólogos generalistas, no especializados en tiroides. Esto exigía un diagnóstico fino", concluyó, en diálogo con Perfil.com.
"La UMP es mala para manejar la cuestión médica de la Presidenta. Actúa bajo el signo del miedo y así no se puede trabajar", fustigó Castro. "Les dicen que no hablen de esto, de lo otro. En el quirófano había 15 personas. ¿Cómo no iba a trascender? Ahora da pena", continuó.
Como si fuera poco, el periodista observó que "también es un mal manejo que en ningún parte médico figuren las firmas de los profesionales en las explicaciones. En cualquier país del mundo figuran". Por eso, "esto no se puede manejar al estilo kirchnerista en donde parece que estén difundiendo una verdad revelada".
¿Podrá la Jefa deEstado retomar su rutina antes de tiempo? "La Presidenta no tiene la tiroides y ahora tiene que hacer el ajuste con medicación, que no es tan simple. Sería bueno que se tome las tres semanas", opinó Castro, desde su conocimiento médico. "Ahora parece que no tuvo nada. No es así: no tiene tiroides", respondió, categórico.