El secretario de Obras Públicas, José Francisco López, uno de los pingüinos investigados por presunto enriquecimiento ilícito, vuelve a estar en la mira de la Justicia. Su patrimonio está sospechado desde hace años, ya que se multiplicó varias veces desde que está en el Gobierno. El fiscal de la causa, Federico Delgado, pidió al juez federal Daniel Rafecas que investigue si López está relacionado con tres fideicomisos y una inmobiliaria que comparten domicilio con la empresa de un funcionario en Tucumán.
Rafecas, que instruye la causa desde hace años, deberá activar la investigación para establecer si las personas, las empresas y los fideicomisos identificados “conforman el círculo íntimo del imputado López”.
La empresa de López, La Araceliti, tiene dos direcciones fiscales: una sobre la Ruta 38, en Los Gucheas, Tucumán –la casa de sus padres–, y otra en la capital de la provincia, sobre la calle San Martín al 600.
La empresa de López es productora de caña de azúcar en tierras propias y arrendadas. Pero en 2008 amplió su objeto social a “construcciones viales y de arquitectura y obras civiles en general; obras y proyectos de arquitectura e ingeniería; servicios de inspección, auditoría y supervisión de obras públicas y privadas”.
Recién en febrero de este año, la Oficina Anticorrupción dictó la Resolución Nº 364 en la que informa al Poder Ejecutivo que debe abstenerse de contratar los servicios de dicha sociedad, ya que su dueño es el encargado formal de adjudicar y controlar la obra pública.
El fiscal pidió al juez que investigue si existe relación entre López y “varias personas físicas y jurídicas que registran ese mismo domicilio”. Se refiere al de San Martín al 600. No sólo comparten el mismo piso, sino que funcionan exactamente en el mismo departamento que la empresa de López: el 3º D.
Entre los compañeros de oficina de La Araceliti hay una inmobiliaria y tres fideicomisos. Dos de estos últimos son fideicomisos de administración de una torre de edificios de la calle General Paz al 800, en San Miguel de Tucumán. Un tercero se denomina Fideicomiso Fidecaña. Según los registros oficiales a los que accedió PERFIL, se dedica al cultivo, la cosecha mecánica y la venta al por mayor de azúcar, el mismo rubro de La Aracelita. El fiscal pidió que se investigue a dos personas que también comparten ese departamento como dirección fiscal para establecer si están relacionados con López y su empresa.