"Debería actualizarse Moyano en la causa: no son 9 troqueles los falsos, sino que son más de 300, y además no hablamos de troqueles, estamos hablando de la vida de personas", disparó contra el poderoso sindicalista quien justamente lo acorraló contra la Justicia, la ex ministra de Salud Graciela Ocaña.
La ex funcionaria que denunció malversación de fondos de la Obra Social de Camioneros fue tildada de "mitómana" durante la rueda de prensa en la CGT. Pero Ocaña no se quedó callada.
"En la causa se habla de bastante más que los 20 mil pesos que mencionaron en la conferencia, pero lo que Moyano no entiende es que robar poco es igual de malo que robar mucho. Hay gente que cree que lo ajeno es propio", le espetó
Ocaña también se refirió al resonante pedido de la Justicia de Suiza. "El lavado de dinero es un delito transnacional. Evidentemente, cuando hay movimientos extraños de dinero, entonces lo que se hace se origina una denuncia. Actualmente el juez Bonadío tiene toda la investigación patrimonial de Moyano, que a quien la Justicia suiza debe pedirle la información", explicó.
Luego de la rueda de prensa en la que los voceros de Moyano anunciaron un paro de camiones y amenazaron a medios de comunicación, la ex jefa de la cartera sanitaria fue entrevistada por Radio10 y C5N, ambos propiedad del empresario Daniel Hadad, quien comptió con Moyano por la concesión del Club Comunicaciones. Esta tarde los portavoces de Moyano lo descalificaron duramente.
"No se deberían poner tan nerviosos los dirigentes, deberían evitar maniobras para demorar la causa", sugirió Ocaña, al tiempo que exhortó al mandamás de la central obrera a "que abra sus libros, sus empresas, su mutual y demuestre a los argentinos cómo ganó su dinero".
En cuanto a la protesta de los camioneros, la ex ministra opinó que "es lamentable que se responda con medidas como esta, ya que esta gente tiene la posibilidad de que se revisen las causas judiciales si creen que se cometió una injusticia con ellos".
A su vez, Ocaña consideró que el paro automotor "es una locura, pero tiene que ver con esta idea de entender que no somos todos iguales ante la ley y cuando comenzamos a romper estas reglas empezamos a vivir en la barbarie". Al final, expresó que espera que el Ministerio de Trabajo "llame a una conciliación obligatoria o tome alguna medida respecto del sindicato".
