Víctor Hugo Morales volvió a la televisión luego de cuatro años y tras haber dejado la pantalla de Canal 7 enojado con el Gobierno. Anoche retornó con Bajada de línea, emitido por Canal 9. Lo curioso que, aunque el programa era en vivo, la primera parte del ciclo fue grabada con una respuesta del conductor al diario Clarín, que lo había incluido en una nota donde se hablaba de la prensa adicta al Gobierno. Su primera invitada fue nada menos que Lidia Papaleo, viuda del empresario David Graiver, para hablar sobre el tema que la semana pasada la Presidenta difundió en cadena nacional: la venta irregular de las acciones de Papel Prensa a los diarios La Nación, Clarín y La Razón.
Como suele suceder en los estrenos, Víctor Hugo confesó que estaba nervioso. Seguramente no sólo por inaugurar un nuevo ciclo en la pantalla chica, sino también porque era la primera vez que Lidia Papaleo, su invitada, aparecía en televisión. La viuda de Graiver no fue sola. Osvaldo Papaleo, su hermano, estuvo sentado detrás de cámara durante la primera parte del programa. Cuando a ella le tocó hablar, se paró y comenzó a caminar en el estudio. Se lo vio atento a todos los detalles, y hasta fue él quien le pidió a uno de los productores del ciclo que le dijera a Víctor Hugo que le pregunte por Rafael Ianover, el testaferro de David Graiver.
Fotógrafos y periodistas de varios medios caminaban detrás de cámara. Esto incomodó a Osvaldo Papaleo, que preguntó: “ ¿Quién los dejó pasar?”. Cuando los fotógrafos respondieron que fueron autorizados por el canal, Papaleo se dio vuelta y siguió concentrado en el testimonio de su hermana. Víctor Hugo, más amable, preguntó: “ ¿De qué medios son, muchachos?”.
Una vez que terminó el programa, Morales intentó comprometer a Lidia para otra entrevista en su programa en radio Continental: "No quiero abusar de vos, Lidia, pero si querés mañana a la mañana te llamo para salir en la radio”, propuso. La viuda de Graiver le contestó: "Llamame y vemos. A las 8.30 empiezo a trabajar”.
Gastón Portal, el productor del programa, estaba en el control y bajó al estudio una vez que el primer capítulo llegó a su fin. El rating había acompañado al debut y se notaba en su sonrisa. Bajada de Línea logró 5.4 puntos; mientras que La Cornisa de Luis Majul por América midió 4.7, y Seis, Siete, 8:00, el programa ultraoficialista que se emite por la pantalla de la Televisión Pública, promedió los 2.9 puntos.
El regreso a la televisión de Víctor Hugo Morales despertó el interés de muchos luego de su ruidosa salida de la Televisión Pública, cuando conducía Desayuno, que en julio de 2006 fue levantado por las autoridades del canal. "Es claro que el Gobierno tiene una especie de tara con todo lo que sea libertad de prensa”, había dicho el relator en aquel momento. Su programa se había vuelto una molestia para el kirchnerismo. Hoy, cuatro años más tarde, el panorama es completamente diferente.
(*) de la redacción de Perfil.com.
