El juez federal Norberto Oyarbide realizó hoy una inspección ocular en la sede de Gendarmería Nacional en Campo de Mayo, adonde llegó en helicóptero y se retiró de la misma manera, en la causa que investiga si esa fuerza realizó tareas de inteligencia sobre dirigentes sindicales y sociales a través de su programa "Proyecto X".
Oyarbide, funcionarios de su juzgado y personal policial inspeccionaron el Centro de Reunión de Información de Campo de Mayo, donde constató el funcionamiento del lugar y retiró copia de documentos archivados en computadoras, informaron a DyN fuentes judiciales.
Los voceros adelantaron que ahora se analizará la documentación encontrada para determinar su contenido y si hay información vinculada a tareas de espionaje.
La abogada Myriam Bregman, querellante en la causa, afirmó que "lo ocurrido hoy es un hecho muy importante: el allanamiento de una sede de una fuerza represiva por estar sospechada de espionaje ilegal". Agregó que "estuvimos meses esperando esta medida y cada día de demora fue tiempo ganado por los investigados para borrar pruebas".
Oyarbide se trasladó desde Comodoro Py 2002, en Retiro, en un helicóptero que partió desde un playón de la Fuerza Aérea lindante a los tribunales, y regresó de la misma forma a su despacho, dijeron las fuentes.
En la causa se investiga si la Gendarmería cometió espionaje interno a través de "Proyecto X", un software de computación donde se almacenaba información sobre personas vinculadas a partidos políticos y organizaciones sociales.
En noviembre del año pasado esas agrupaciones presentaron una denuncia luego de constatar que en "Proyecto X" se guardaba información política y particular de personas que habían participado en cortes de la ruta Panamericana.
Oyarbide ordenó a la SIDE una pericia que está en marcha para determinar el tipo de información contenido en "Proyecto X".
El jefe de Gendarmería, Héctor Schenone, reconoció la existencia de ese software, pero dijo que la fuerza no hace espionaje interno y que la información recabada es a pedido de la Justicia.
Pero los denunciantes alegan que efectivos hicieron seguimientos de personas y que hay datos que no están relacionados con las causas judiciales.
En tanto, la abogada Bregman, si bien destacó la medida, cuestionó "la decisión del juez Oyarbide reafirmando que en las pericias informáticas sobre los elementos secuestrados en Campo de Mayo y en el Edificio Centinela (donde funciona el Proyecto X) participarán dos miembros de Gendarmería, uno de la SIDE que cuenta con identidad reservada y sólo un perito oficial".
"El juez acaba de rechazar nuestra impugnación a que participen de la pericias los miembros de la Gendarmería que propuso el propio comandante Schenone. ¿A quién se le puede ocurrir que serán imparciales a la hora de participar en las pericias si pertenecen a la fuerza investigada? ¿Tenemos que creer que los propusieron inocentemente o para controlar lo que va surgiendo en su contra? Es sumamente preocupante", alertó en declaraciones a la prensa.