Luego de la interna que vivió el Frente de Todos por los exreferentes kirchneristas que se encuentran detenidos por causas de corrupción, el expresidente Eduardo Duhalde declaró este miércoles 19 de febrero que en Argentina no hay presos políticos y sostuvo que hablar de eso provoca "una discusión inútil" que se debe resolver en la Justicia.
"Es una discusión inútil, Alberto (Fernández) habla del concepto claro de lo que es un preso político, que es un preso a disposición del Poder Ejecutivo y eso no hay. Hay personas que se dicen presos políticos, que están mal juzgados, pero es una discusión que no sirve para nada y no me sumo en esas cosas", explicó Duhalde en una entrevista con Radio Rivadavia.
Al ser consultado sobre las situaciones del ex vicepresidente Amado Boudou y el ex ministro de Planificación Federal Julio De Vido volvió a sentar posición: "Son presos por la Justicia. Si ellos creen que son presos políticos que lo digan pero son presos de la justicia y eso se arregla en la justicia".
Para Cafiero no hay presos políticos, pero sí "detenciones arbitrarias"
La polémica se desató en el Gobierno cuando el jefe de Gabinete, Santiago Cafiero, descartó que existan "presos políticos" sino "detenciones arbitrarias". Varios funcionarios y referentes kirchneristas, entre ellos las ministra Elizabeth Gómez Alcorta, salieron a corregirlo y provocaron el enojo del Presidente. "Es una discusión semántica. El preso político es el que está a disposición del Poder Ejecutivo. Yo no tengo a nadie detenido. Me molesta que digan que tengo presos políticos porque no los tengo", expresó Alberto Fernández y envió un mensaje para los suyo: "Hay que decirle a los compañeros que no seamos tontos, quieren dividirnos. No sé qué estamos discutiendo, no sé en qué lugar me quieren poner".
Más tarde, Milagro Sala, que cumple prisión domiciliaria, se autodefinió como "presa política" por "todo lo que vengo pasando en el transcurso de estos cuatro años", en referencia al gobierno de Cambiemos, presidido por Mauricio Macri. Además reflexionó que, la discusión "semántica" sobre su situación procesal, es "un pretexto" para no resolver su caso.
DR/MC