Aunque se decía que el cargo del cuestionado Enrique "Pepe" Albistur pendía de un hilo, en su primera conferencia de prensa Cristina Kirchner no dudó en confirmarlo. Y fue por más, porque hoy el secretario de Medios de la Nación recibió otro mimo del Gobierno: controlará la contratación de agencias de publicidad sin pasar por la agencia de noticias Télam, dirigida por Martín Granovsky, con quien está enfrentado.
El decreto 1311/2008, publicado hoy en el Boletín Oficial, exceptúa a la Secretaria de Medios de Comunicación de la "obligatoriedad impuesta por el Decreto 2219/71 y su modificatorio, con relación a de los Actos de Gobierno que se publiquen en el Boletín Oficial de la República Argentina". El decreto 2219/71 estipula que toda la publicidad oficial debe realizarse por medio de Télam, que actúa como una especie de agencia de publicidad de la Secretaria de Medios, el organismo que concentra los pedidos de los diferentes ministerios y secretarias del Poder Ejecutivo desde 1996.
Con este intrincado procedimiento Albistur se hará más poderoso y consumará un viejo objetivo: en diciembre, el secretario de Medios intentó colocar a su contador y delfín, Alejandro Lenzberg, que hoy se desempeña como subsecretario de Gestión de Medios, al mando de Télam, para que "controle todo el proceso de recepción y entrega de pautas oficiales", reveló por entonces una fuente a Perfil.com. Ese plan no tuvo éxito y "Pepe" debió seguir "negociando con el enemigo" los millones de la publicidad oficial.
La Asociación de Derechos Civiles calificó al marco legal que regula la publicidad como "complejo y ambigüo" y dijo que "permite a los funcionarios distribuir la publicidad con discrecionalidad casi total". El decreto publicado hoy no hace más que profundizar esa tan criticada manera de "repartir" pauta.
¿Cómo nace una publicidad oficial? Primero, un organismo del Estado cursa el pedido a la Secretaria de Medios que, a su vez, solicita formalmente a Télam que organice la campaña, la planifique y negocie los términos y condiciones con los distintos medios. Télam envía el plan a la secretaría, que lo aprueba o rechaza.
Todos estos pasos será los que podrá saltearse Albistur, quien desde ahora podrá negociar él mismo con qué agencias trabajar al momento de difundir los actos de Gobierno que se publiquen en el Boletín Oficial (una denominación tan vaga e imprecisa que podría contener a todos los actos de gobierno, desde licitaciones y declaraciones hasta decretos y ordenanzas).
La resolución de hoy también podría responder a la interna que se vive entre la agencia Télam y la secretaría de Medios, tras la denuncia de sobornos que lanzó Granovsky luego de un allanamiento en el quinto piso de la agencia de noticias.
Los especialistas consultados por Perfil.com mostraron su desconcierto por este decreto, ya que "no es claro sobre sus alcances". Este medio preguntó a la jefatura de Gabinete sobre el decreto, pero sólo atinaron a derivar la consulta a la secretaria Legal y Técnica, que le pasó la pelota a la de Medios, principal actor de este proceso de pauta oficial. Así las cosas, nadie pareció capaz, o dispuesto, a brindar precisiones sobre los efectos del decreto 1311/08, ni del por qué de la medida. El inentendible texto lleva la firma de la Presidenta Cristina Kirchner, el ministro del Interior, Florencio Randazzo, y el jefe de Gabinete, Sergio Massa.
(*) redactor de Perfil.com