“No sé quién es el responsable físico de la muerte de Rucci”, aseguró Roberto Perdía. El antiguo líder de la agrupación Montoneros se desvinculó del asesinato del ex titular de la CGT y admitió que la organización que lideraba fue la más perjudicada políticamente con el crimen.
“Las principales víctimas políticas de ese operativo fueron los propios montoneros”, dijo Perdía en declaraciones al programa Voz y Voto, de América 24. En el marco de la reapertura de la causa por el crimen del ex líder sindical, el antiguo dirigente revolucionario vinculó el crimen de Rucci con la Masacre de Ezeiza.
“No puedo separar una cosa con la otra”, dijo Perdía, quien acusó a Rucci y a José López Rega de organizar la emboscada que terminó con la matanza de decenas de militantes que el 20 de junio de 1973 (tres meses antes del crimen del metalúrgico) iban a recibir a Juan Domingo Perón a Ezeiza tras 18 años de exilio.
Los más perjudicados. Pese a que nunca se supo quién fue el verdadero autor del crimen de Rucci, Perdía reconoció que “cualquiera haya sido el origen de los disparos, las principales víctimas políticas de ese operativo fueron los propios montoneros”. Y agregó que la muerte del sindicalista “ahondó las divisiones en el seno del pueblo y las diferencias internas”.