El intendente de Pinamar, Roberto Porretti, investigado por presuntas "coimas", insistió hoy en que es completamente inocente y dijo que, previo a las denuncias, intimó a lo dueños de las discotecas de la ciudad balnearia a que pusieran sus locales “en condiciones” para evitar accidentes.
“Yo no quería otro Cromañón aquí”, sostuvo Porretti, en declaraciones a radio Continental, tras admitir haber tenido reuniones con los dueños de Ku y El Alma.
Dijo que en esos encuentros participaron alrededor de “nueve personas” y atribuyó las denuncias en su contra a las exigencias que impuso a los empresarios de la noche.
Tras realizar éstas declaraciones, el jefe comunal salió de la intendencia para saludar a un grupo de poco más de un centenar de personas que había acudido a manifestarle su apoyo.
Porretti reiteró que no renunciará a su cargo ni pedirá licencia.
Fuente: DyN