Luis Malvido, presidente de Aerolíneas Argentinas, aseguró este lunes 17 de diciembre que el conflicto con los pilotos es "una cuestión política de los gremios, que tienen una ideología respecto al Gobierno y encontraron en Aerolíneas un buen blanco para pelear esa batalla". "El problema de fondo es político", agregó el funcionario entrevistado en el canal Todo Noticias. "Cualquier cosa es un problema", explicó. "Todo empezó cuando una de las empresas chicas que llegó recientemente al país echó a una azafata. Así empezamos, por un despido. A la semana siguiente pararon todas las líneas, menos la empresa que había despedido a esa azafata".
El presidente de la aerolínea estatal aseguró que "si eso es motivo para parar la aviación de un país, no estamos hablando de salarios ni de pilotos extranjeros". "Venimos de un noviembre catastrófico, con movilizaciones, asambleas, paros que dejaron a miles y miles de pasajeros tirados, sin anuncios, sin saber que iba a suceder", contó el presidente de AA respecto a las últimas medidas de fuerza.
"Acá se está hablando de una cuestión política de los gremios, que tienen una ideología respecto al Gobierno y encontraron en Aerolíneas un buen blanco para pelear esa batalla", Luis Malvido.
El funcionario especificó que desde la empresa harán "todo lo que esté a nuestro alcance para que esto no siga escalando" y haya vuelos en forma normal durante fin de año, pero al mismo tiempo aseguró que el gobierno nacional convocará a "todos los gremios formalmente a discutir los problemas, porque sabemos que los hay". "Me cuesta decir que no va a haber sorpresas porque tuvimos tantas, pero haremos todo lo que esté en nuestro alcance para que no los haya", agregó.
Aerolíneas Argentinas "es una compañía muy deficitaria con muchos problemas financieros pero sabemos que no queremos que la carga caiga sobre nuestros empleados que todos los días se rompen el lomo para que los pasajeros salgan en horario", dijo Malvido, quien desestimó que haya planes para autofinanciar la compañía en 2019. "El plan era el año que viene, pero este año lo arruinó el precio del petróleo y luego la devaluación, ya que todos los costos operativos y de mantenimiento de los aviones están en dólares; el año que viene no va a ser un año de equilibrio, y vamos a ver cómo evoluciona la macro para el 2020".
Trasfondo. Los pilotos habían amenazado la semana pasada con una huelga durante 48 horas tras rechazar las últimas ofertas de aumento salarial y en protesta contra una resolución de la Administración Nacional de Aviación Civil (ANAC) que habilita el ingreso de pilotos extranjeros para operar en vuelos comerciales de cabotaje. La ANAC emitió la resolución 895/2018 el pasado 22 de noviembre por la que flexibilizó los requisitos para pilotar vuelos comerciales. Las únicas aerolíneas que no se unirían a la protesta son las low cost FlyBondi y Norwegian.
"Están permitiendo el ingreso y la validación automática, de licencias pertenecientes a pilotos extranjeros, sin exámenes en la Argentina que acrediten seguridad", había reclamado Pablo Biro, secretario general de la Asociación de Pilotos de Líneas Aéreas (APLA), uno de los sindicatos de pilotos más grandes. Según aseguró, los sindicatos llevarán adelante "un plan de lucha que no está vinculado a ningún conflicto salarial en particular, sino con la política aerocomercial del Gobierno, que no tiene ninguna vocación de solucionar nada".
"Todos los empleados son protagonistas de nuestro crecimiento; hasta octubre estábamos en el tope en Latinoamérica en puntualidad, hasta que llegaron los paros: el mes de noviembre fue un desastre en puntualidad, volvimos a la época negra de otros años", Luis Malvido
Los dos aeropuertos más grandes del país, el Aeroparque Metropolitano Jorge Newbery y el Internacional Ministro Pistarini, cerraron al menos tres veces en el último mes. El gobierno acusó a los gremios de tener intencionalidades políticas con las medidas de fuerza que llevaron a cabo en los últimos dos meses. En términos similares a los de Malvido se había manifestado el ministro de Transporte, Guillermo Dietrich: "Lo más probable es que la huelga sea política. El grupo de sindicatos quiere generarle un gran daño a Aerolíneas, quiere generarle un daño al mercado aerocomercial argentino, y toman de rehenes a los pasajeros por esta postura totalmente irracional".
D.S.