La legisladora porteña kirchnerista María Rachid, famosa por su pelea a los gritos con el extitular del INADI Claudio Morgado en 2011, presentó un proyecto de ley para que los travestis y transexuales de la Ciudad de Buenos Aires cobren una pensión no contributiva de casi 2.000 pesos por los maltratos recibidos en los últimos años.
El proyecto se basa en los cambios introducidos por las ley de Matrimonio Igualitario y, sobre todo, la de Identidad de género, y propone que “las personas trans mayores de cuarenta (40) años, con domicilio en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, que hayan realizado su cambio registral conforme la Ley Nacional Nº 26.743 y su decreto reglamentario PEN Nº 1007/2012” puedan cobrar la pensión.
El monto será de “1.200 unidades fijas conforme el Art. 3 de la Ley Nº 1052”, compatible con ingresos “que no superen las 3.500 unidades fijas mensuales”, lo cual, tomando los valores del presupuesto 2012, equivale a 1.992 pesos mensuales para quienes cobren menos de 5.810 pesos.
"Las personas trans son expulsadas de sus hogares a los 12 años y tienen un promedio de vida 35 años. No tienen otro recurso que no sea la prostitución, que a su vez tiene un tiempo para ser ejercida, y cuando caduca no tienen otra salida laboral", explicó la autora del proyecto en diálogo con Perfil.com.
Rachid contó que "es un proyecto que vinimos trabajando y pensando hace muchos años con la Federación Argentina de Lesbianas, Gays, Bisexuales y Trans (FALGBT), que tiene que ver con reparar siglos de discriminación y opresión y violencia hacia las personas trans en nuestro país y en particular en la ciudad de Buenos Aires".
El proyecto de la legisladora forma parte de "una ley integral que contempla todos los derechos" de las personas trans. Pero, como el debate de la misma demandará tiempo en la legislatura porteña, el tema de las pensiones fue presentado aparte porque "es más urgente, para ver si puede tratarse más rápido", dijo Rachid a Perfil.com
"Las personas trans no pueden acceder hoy a ninguno de sus derechos. Está la ley de identidad de género, pero hay muchos años de discriminación y violencia, y a las personas trans les cuesta mucho acceder a la salud, a la educación y al trabajo", concluyó la legisladora.