—¿Qué balance realiza de su gestión?
—Fue un buen 2013 porque permitió terminar con la incertidumbre sobre la constitucionalidad de la Ley (de Medios). Pasaron cuatro años de maniobras dilatorias del Grupo Clarín, de mentir sobre la ley, de campañas furiosamente agresivas. Consiguieron una situación de privilegio con vínculos oscuros con la dictadura militar, con la década del 90, mientras el país se hundía, ellos crecían.
—¿El kirchnerismo ganó la batalla cultural, en el sentido de que ahora está instalado quién está comunicando?
—Lo que se rompió es la sensación de que lo que aparecía en la pantalla es la verdad.
—¿Por qué no se pudo cubrir el 33% del espectro con organizaciones sin fines de lucro, como marcaba la ley?
—Se hizo muchísimo. Si uno recorre la Argentina, hubo profundas transformaciones. Hay mucho por hacer, no se logró el 33% que establece la ley, pero hay nuevos actores de la comunicación, hay nuevas productoras audiovisuales y miles de horas de contenidos, hay nuevas radios y canales en las universidades, en escuelas.
—¿Tienen capacidad económica esos nuevos medios?
—Tenemos programas de fomento con recursos para capacitación y para instalación de equipos. Faltan concursos, planes técnicos, fomento, falta avanzar con el 33%. Pero es un proceso.
—¿Debería regularse el reparto de publicidad oficial?
— Cuando era diputado presenté un proyecto y en algún momento se iba a avanzar en eso. La publicidad oficial tiene que tener la perspectiva federal y de fomento de herramientas comunicacionales que de otra manera no pueden avanzar. Hay una fuerte distribución de la publicidad oficial en el conjunto de medios de las distintas provincias y en todo el país, lo que permite avanzar en la pluralidad de voces.
—¿Debería haber una nueva ley que regule internet?
—Si me decís que tiene que haber una ley que tome el conjunto de las telecomunicaciones, creo que sería correcto. Es el debate que los legisladores tienen que tener presente.
—¿Fue irregular el paso de licencias de Hadad a Cristóbal López por C5N y las radios?
—No, está dentro de los primeros planes que se aprobaron. Hadad estaba obligado a vender porque estaba excedido (de licencias), y el Grupo Indalo estaba en condiciones de comprar. Para eso Indalo tuvo que desprenderse de actividades de servicio público (recolección de residuos en Comodoro Rivadavia) y vender en lo que estaban excedidos (las FM Vale y TKM).
—¿López, al poseer concesiones de juego y de rutas, cumple con la Ley de Medios?
—Las incompatibilidades son con servicio público, no con cualquier actividad que se vincule con el Estado. El juego no es un servicio público y rutas no tiene. (N.d.R: López compró en 2013 la concesión de la autopista Ezeiza-Cañuelas).
—¿En el caso de Telefe?
—Está entre los pendientes. Tienen tres temas para resolver: si exceden la cuota de mercado y si existe incompatibilidad con respecto a capitales extranjeros (Telefónica de España) y el hecho de que tenga relación con un servicio público (Telefónica de Argentina). Se está estudiando el tema.
—¿Y Clarín?
—Presentó su plan de adecuación y está en estudio, y lo que le hemos planteado es que debe cumplir con la grilla de canales. Si eso se concreta, podemos avanzar y, o volvemos al plan de oficio, o si no, tienen 180 días para terminar la adecuación.
—¿De verdad cree que fue una derrota para Clarín?
—Fue un triunfo de la democracia. Es sumamente importante terminar con esto de que alguno tiene “coronita”. Creyeron, durante muchos años, que podían llamar a la dirigencia política para decirle qué ley había que sancionar.
—¿Aún tiene el pack premium de Cablevisión en su casa?
—No, no tengo Cablevisión, lo saqué porque no quería tener una empresa que no cumpla con la ley. Ahora tengo Telecentro, con el pack premium también.