Denunciaron más amenazas al peluquero de Néstor Kirchner en una semana clave para la causa
Carlos Monteverde sufrió una balacera en su domicilio, cuando un empresario y cliente suyo lo atacó. El estilista denunció distintas amenazas y su hija acusó a la hermana del sospechoso de pincharle las ruedas de su camioneta.
El peluquero Carlos Alejandro Monteverde denunció amenazas |
Cedoc
El caso que investiga las agresiones contra Carlos Monteverde, peluquero del ex presidente Néstor Kirchner y otras figuras famosas, volvió a sumar un nuevo episodio. A poco de que se realice una nueva pericia para determinar la imputabilidad de Lucas Hernán D'Adamo, acusado de disparar más de una decena de veces contra su casa, se conoció una nueva amenaza en contra suya y su familia.
Mientras el acusado permanece internado en un neuropsiquiátrico dentro una penitenciaría, el reconocido estilista denunció que tras el hecho había recibido varias amenazas de muerte, incluyendo balas y un pequeño ataúd. Según pudo saber PERFIL, una mujer desinfló con un elemento cortante las ruedas de su camioneta, hecho que quedó registrado en una cámara de seguridad de la zona.
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La denuncia fue realizada por el hijo de Monteverde, que también se desempeña como peluquero. Según figura en el expediente, al que accedió PERFIL, se trasladó con su vehículo para atender a un cliente y la dejó estacionada a la vuelta de su comercio. Al salir, notó que la rueda delantera izquierda y la rueda trasera del mismo lado estaban desinfladas, y que ambas "tenían un corte con un cuchillo o elemento similar".
Por ese motivo le pidió a un vecino ver las grabaciones de su cámara de vigilancia. En el video pudo observar que, un auto marca Peugeot modelo 407 estacionó al lado de su camioneta, y que del lado del acompañante descendió una mujer, a la cual reconoció como la hermana de D’adamo.
"Hoy temo por la seguridad mía y la de mis padres, ya que hay más de 20 armas de fuego que son de Lucas D’adamo" y estas "quedaron a la merced de sus tenedores, o sea la madre y la hermana", concluyó el joven tras definir a la mujer como una "persona violenta".
Realizarán una nueva pericia al empresario Lucas D’adamo
Este martes y miércoles se llevarán a cabo los nuevos estudios para resolver el caso, mientras D'Adamo, que era cliente de Monteverde, permanece en la Alcaidía de Melchor Romero a la espera de una definición sobre su salud mental.
El sospechoso, dueño de Glass-Ten, empresa dedicada a la fabricación de vidrios especiales laminados, fue detenido el 18 de mayo de 2022 en la localidad bonaerense de Ramos Mejía, donde efectuó 11 disparos contra la casa del estilista -uno de los cuales rozó su cabeza-, según consta en el expediente.
En junio de este año, la fiscal Alejandra Núñez, titular de la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) 8 de La Matanza pidió elevar a juicio la causa caratulada como "abuso de armas agravado, amenazas agravadas, portación de arma de fuego de uso civil y portación ilegal de arma de guerra". También solicitó que "de manera excepcional" un tribunal de Quilmes realice una nueva pericia sobre el acusado para saber si es o no imputable para afrontar el proceso.
El empresario fue detenido el 18 de mayo de 2022, tras balear la casa del peluquero.
Tras ser capturado, la Policía allanó su casa, donde se encontraron seis armas de fuego -una de ellas tenía un "silenciador de fabricación casera"-, de las cuales sería usuario legítimo y un arma de guerra. Al ser capturado reconoció haber "consumido alcohol y entre 0,5 y 0,7 gramos de cocaína", algo que realizaría de forma frecuente.
En primera instancia, los peritos psiquiátricos oficiales consideraron que el agresor "no entendía la voluntad" de lo que había hecho y lo declararon "inimputable". Además de una pericia y del consumo de estupefacientes, se apoyaron en el testimonio de su hermana, que dijo que tras la muerte de su padre en 2018 "su hermano se desbordó".
Las armas secuestradas al empresario.
Sin embargo, la fiscal Núñez ordenó la repetición de la pericia psiquiátrica después de que el Dr Rafael Herrera Milano, perito de parte de la víctima, manifestara "contradicciones y errores insalvables" que tendría el diagnóstico hecho por las psiquiatras y psicólogas. Incluso las especialistas fueron apartadas de la causa y acusadas de "incumplimiento de los deberes de funcionario público" tras conocerse que una de ellas tenía una relación de amistad con el perito de parte contratado por el sospechoso, Andrés Alberto Mega.
El psiquiatra forense señaló que en la pericia oficial "no hay pruebas de aquello que aseguran el agresor y su hermana". También puntualizó que el empresario tiene habilitación de la Agencia Nacional de Materiales Controlados (ANMAC) como legítimo usuario de seis de las armas encontradas. Para poder serlo, razonó que debió pasar los correspondientes análisis psicotécnicos.
Otras amenazas denunciadas por el peluquero Carlos Monteverde
Monteverde, que le cortó el pelo a Diego Maradona y a otros famosos, e incluso trabajó cuatro años en la Casa Rosada durante el gobierno de Néstor Kirchner, a quien también atendió en esos años como a sus secretarios privados, denunció en otras oportunidades que recibió varias amenazas de muerte.
"Dejá de denunciar. Última advertencia", fue uno de los primeros mensajes que llegaron a su domicilio. Esta frase le llegó en una carta cuyas letras habían sido recortadas de diarios y revistas y también llevaba un proyectil pegado en el papel.
Las amenazas al peluquero.
Otra de las intimidaciones que le llegaron al coiffeur fue a través de una caja de cartón a la casa que fue baleada por el empresario, ubicada en la localidad de Ramos Mejía, partido de La Matanza. En su interior, tenía un pequeño féretro confeccionado con madera con otra bala y un mensaje que decía "No declares", escrito con fibrón azul.
El día del ataque, las balas impactaron en una de las ventanas de la Citroën Berlingo de la víctima, que estaba ubicada en la puerta del garaje, en una reja y la ventana del living donde estaba junto a su esposa. Monteverde reconoció a D'adamo porque durante la agresión le gritó una frase que, para él, no tiene sentido: "Te voy a matar, hijo de puta, vos que estás en la SIDE".
