Sergio Massa está sentado en su escritorio de la Intendencia de Tigre. Tiene dos computadoras en las que no para de chequear las noticias, dos celulares, un control remoto, una pila de expedientes, un café y una coca light. De fondo, un Pérez Celis original. Su hijo Tomás, de 4 años, mira dibujitos animados en un plasma 42 pulgadas que cuelga de una pared del despacho. Está descalzo y con el uniforme del Jardín: "Hoy un nene me tiró una plastilina en el ojo y me puse a llorar”, cuenta. Papá Massa se ríe: “¿Lloraste?, ¡Pero qué maricón!”.
Desde que dejó la jefatura de Gabinete hace tres meses, Sergio Massa está más distendido. Dice que haber salido del foco de atención para volver a la municipalidad no sólo le devolvió varias horas de sueño, sino la posibilidad de estar más tiempo con su familia. Ahora puede planear tranquilo su estrategia para desembarcar en 2011 en La Plata: "Quiero ser Gobernador de la provincia de Buenos Aires", se entusiasma.
Llegó al Gobierno con aires de cambio pero se fue al año sin poder modificar nada ¿Cuál es su balance? Creo que hubo cosas que sí se pudieron modificar y hubo cosas que no. Y en todo caso una persona no hace a la trayectoria de un Gobierno.Yo tenía un rol determinado en un momento determinado.
¿Siente que fracasó? Yo no soy una novia despechada que habla de las cosas que no pudo hacer. En general, frente a un hecho puntual, trato de seguir adelante y de renovar mis expectativas y mis ilusiones.
¿Qué cosas no pudo hacer? Entrar en esa lógica de respuesta es entrar en la lógica de la novia despechada, lo que pude hacer lo hice y lo que no pude hacer no lo pude hacer y punto. Ahora me tengo que concentrar en lo que tengo que hacer como intendente de Tigre.
¿Cómo es su relación con Néstor Kirchner hoy? Igual que antes, tal vez con una elección en el medio, pero es una relación de mutuo respeto.
¿Qué aprendió de Néstor Kirchner? Que además de tener la capacidad de planificar hay que cuidar los recursos del Estado. Es un tipo que tiene una mirada muy estricta de lo que es superávit fiscal, tiene un criterio sano de la administración.
¿Y Cristina qué le enseñó? El estudio sobre los temas, es metódica y estudiosa sobre cada tema que aparece en la agenda.
¿Habla con ella? Hablé una vez después de ser jefe de Gabinete.
¿Es cierto que le ofrecieron volver al Gobierno? No.
¿Aceptaría si se lo ofrecieran? No, tengo un compromiso con Tigre. Una cosa es una excepción en un momento muy particular y otra cosa es un hábito. Mi hábito tiene que ser responder con esfuerzo y con trabajo al vecino de Tigre.
¿Qué es lo mejor y lo peor de Néstor Kirchner? Lo mejor es que tiene mucha determinación, mucha voluntad. Lo peor es que a veces no escucha.
¿Qué es lo mejor y lo peor de Cristina? Lo mejor es su capacidad de estudio y de profundización de los temas, y lo peor me lo reservo porque es la Presidenta de la Nación y merece respeto de la investidura.
Él fue quien lo apodó "Massita", ¿le molesta? No, en definitiva tengo 36 años. Algunos lo quisieron usar peyorativamente, pero a la hora de ir a una elección yo mostré que lo peyorativo en el microclima no es peyorativo en términos electorales. Acá sacamos más del 53% de los votos.
¿Va a asumir la banca de diputado? Ya dije que no.
¿Desde cuándo sabía que no iba a asumir la banca? La verdad es que no fue una cosa que se decidió en un momento, digamos que tiene más que ver con el compromiso con Tigre.
¿Siente que estafó al electorado? No, la gente sabe perfectamente a la hora de elegir qué va a hacer cada uno. Mucho más la gente de Tigre.
¿Quiere ser Gobernador de la provincia de Buenos Aires? Algún día sí.
¿Le gustaría? Sí, absolutamente.
¿Cómo ve a la provincia hoy? Le falta gestión porque le faltan recursos. Es muy difícil hacer gestión cuando la mayor parte de tu recurso lo tenés que volcar sólo a pagar sueldos.
¿Habla con Scioli? Hablé dos veces desde que dejé de ser jefe de gabinete.
¿Le da consejos? Soy muy joven para dar consejos. Alguna opinión en algún momento le he dado, por ejemplo sobre temas fiscales y temas institucionales, pero hoy la responsabilidad la tiene él.
¿Cree, como Buzzi, que "Scioli es el felpudo de Kirchner"? Creo que esa dinámica de faltar todo el tiempo el respeto a las personas es mala para la política. Scioli es el gobernador de Buenos Aires y lo votaron muchos bonaerenses. Me puede gustar más o menos, pero es el gobernador y hay que respetarlo. La relación que mantiene con los Kirchner es la que él cree más importante de cara a la sustentabilidad y al futuro de la provincia.
¿Qué relación tiene con Eduardo Duhalde? Ahora hace un tiempo que no hablo, pero le tengo mucho respeto. Nunca lo negué en público ni lo voy a hacer. A mi me dió una gran oportunidad a los 29 años y en la vida hay que ser agradecido.
¿Le dio algún consejo? Pocos, en ese momento Duhalde tenía problemas más graves que darle consejos a un chico de 29 años. Creo que el principal gesto fue la portunidad. Pero considero que él tiene una dinámica de construir en base a acuerdos que es un aprendizaje en sí mismo para los que hacemos política.
¿Qué es lo mejor y lo peor de Duhalde? Lo bueno es que es muy amigo de sus amigos, y lo malo es que es muy amigo de sus amigos.
¿Cree que Duhalde sería una buena opción para manejar el PJ? Hay un montón de dirigentes jóvenes que también merecen la oportunidad, y me excluyo. Me parece que hay que pensar para adelante y no para atrás.
¿Duhalde sería retroceder en ese caso? No digo que él sea retroceder, digo que el desafío es construir una nueva generación de dirigentes.
¿Cuál es su postura respecto de la Ley de Medios? Lo único que te puedo decir es que me pareció muy inteligente el editorial de Fontevecchia del fin de semana.
¿Sigue siendo kirchnerista? Yo sigo siendo intendente del peronismo de la provincia de Buenos Aires.
*Redactora de Perfil.com
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