La ausencia del empresario Paolo Rocca, cabeza del grupo Techint, en la lista de indagados de la causa de los cuadernos de las corrupción es la comidilla del mundo empresarial. “Creemos que se podría abrir una nueva etapa en la investigación y que tal vez eso incluya una citación a Rocca. No lo sabemos”, especularon en una de las compañías afectadas por el caso de los cuadernos.
Lo cierto es que el empresario no figura con nombre y apellido en los cuadernos del chofer Oscar Centento, como sí aparecen otros hombres de negocios. Pero luego de que dos de sus hombres de mayor confianza admitieran que la compañía pagó “contribuciones” al gobierno de los Kirchner en 2008, la responsabilidad del número uno del grupo parece caer de maduro. Sin embargo, no fue citado al cierre de esta edición.
La exclusión de Rocca de la lista de empresarios que debieron dar explicaciones sobre por qué sus compañías pagaron coimas es un caso único en la causa. Sea motu propio, como el caso del primo presidencial Angelo Calcaterra, o citación del juez, el resto de los empresarios cabeza de sus compañías negociaron una declaración como arrepentidos. Y la única explicación que le encuentran los empresarios consultados para esta nota al caso Rocca es “porque es Rocca”.
El hombre que comanda Techint, una de las compañías más importantes del país, terminó dando una defensa pública en un encuentro de la Asociación Empresaria Argentina (AEA), diez días después de que uno de sus ejecutivos de mayor confianza, Luis Betnaza, se presentara ante la Justicia para hacerse cargo de haber ordenado el pago de coimas. El objetivo de los pagos era obtener la “ayuda” del matrimonio presidencial para que el entonces presidente de Venezuela, Hugo Chávez, no nacionalizara Sidor. Rocca dijo entonces: "Techint no participó en el club de corrupción de la obra pública de ninguna manera". Y agregó: "Betnaza pagó". El ejecutivo fue procesado esta semana como miembro de una asociación ilícita y cohecho.
La primera y única detención de un ejecutivo de Techint se ordenó recién el 6 de agosto, dos días después de que Infobae revelara que el grupo estaba en los cuadernos y que PERFIL identificara al hombre señalado como el ejecutor del pago de coimas: Héctor Zabaleta, ex director de Administración de la compañía de los Rocca
Techint estaba en la mira del fiscal Carlos Stornelli y del juez Claudio Bonadio desde el inicio de la investigación. En la lista de los primeros allanamientos, Bonadio incluyó a Techint en la nómina de empresas que serían visitadas por la Policía Federal el 1º de agosto. Sin embargo, el allanamiento fracasó. Así consta de las actas del expediente, a las que accedió PERFIL.
La fuerza pública debió presentarse al menos tres veces en las sedes de la compañía, el 1º, el 3 y el 6 de agosto, para no llevarse nada. La documentación que el juez Bonadio había ordenado secuestrar fue directamente presentada por un abogado de Techint en el expediente porque en su momento la empresa dijo no poder cumplir con la orden del juez.
La primera y única detención de un ejecutivo de Techint se ordenó recién el 6 de agosto, dos días después de que Infobae revelara que el grupo estaba en los cuadernos y que PERFIL identificara al hombre señalado como el ejecutor del pago de coimas: Héctor Zabaleta, ex director de Administración de la compañía de los Rocca. El lunes siguiente a ambas publicaciones, Bonadio ordenó la detención de Zabaleta, de 72 años, y allanó su domicilio. Es el único de los involucrados en la causa de los cuadernos al que no se le conoce la cara. La orden judicial fue que nadie tomara fotografías de Zabaleta, a excepción de las de rigor para el legajo policial, informaron fuentes del caso. El hombre fue trasladado con el rostro cubierto.
Zabaleta ya estaba en la mira de los investigadores desde el 1º de agosto. Según consta en las actas de los allanamientos, los oficiales de la Federal preguntaron por el ex ejecutivo y pidieron su legajo personal en Techint. La documentación fue aportada días después por la empresa. Cuando los policías pidieron ver la oficina de Zabaleta, el abogado Horacio de las Carreras les dijo que la habían desmantelado.
Zabaleta es clave en el esquema de supuestos sobornos de Techint. No solo admitió haber pagado unos “$20 millones” al ex funcionario Roberto Baratta en el subsuelo de la compañía en Retiro. Lo que dijo pone en duda la versión oficial de Rocca y compromete al grupo en una investigación por sobornos transnacionales que lleva adelante un equipo de fiscales en Milán, como viene informando PERFIL.
Cuando declaró como arrepentido ante el fiscal Stornelli, Zabaleta dijo: "Todas las veces, Baratta me exigía dólares, me decía que los pesos no le servían. Me profería amenazas, como cortarnos el gas o importar tubos de China, diciéndome ‘ahora vas a ver dónde te vas a meter los tubos’. También me amenazaba con que no nos iba a dar nunca más obra pública", declaró el ejecutivo. Y agregó que las órdenes de pagar a Baratta las recibía de Betnaza.
Sin embargo, Bonadio estimó que en el caso de Zabaleta "no se ha determinado con el grado de certeza" si el ex ejecutivo de Techint tuvo responsabilidad en el pago de las coimas que ejecutó. Le dictó falta de mérito, una decisión que implica que Zabaleta seguirá siendo investigado porque el juez considera que no tiene indicios para procesarlo.
