El secretario general del gremio UPCN, Andrés Rodríguez, aseguró en la mañana del martes que la CGT analizará el miércoles, en la reunión del Consejo Directivo, la posibilidad de suspender la movilización convocada para el martes 22 de agosto, aunque aclaró que esa convocatoria "no es un problema político".
"La marcha no es un problema político, nunca fue enfocado así, sino como una exteriorización de una realidad bastante acuciante en vastos sectores de la población", afirmó en una entrevista a radio El Mundo. El sindicalista admitió que existen "opiniones divergentes" dentro de la central obrera luego de las PASO, y explicó que intentarán "unificar a través de una síntesis que contenga a todos".
Rodríguez sostuvo que "la situación en algunos sectores, sobre todo en el trabajo, es bastante negativa y difícil" y que "aún no ha habido una clara señal esperanzadora para estos sectores". "La situación de deterioro no comenzó ahora, viene de antes. Pero hasta ahora se ha agravado, no se ha mejorado. Hay sectores industriales que están atravesando situaciones de cierre, de despidos, de suspensiones, de pérdida de poder adquisitivo. También hay sectores con problemas de trabajo o de trabajo precario. Todo esto no se ha mejorado", añadió.
La medida de fuerza había sido anunciada en julio, tras el desalojo en PepsiCo, como forma de protesta contra las medidas del Gobierno. Sin embargo, según trascendió en las últimas horas, algunos dirigentes llevarán el miércoles la propuesta de levantar la movilización luego del apoyo que el oficialismo recibió en las elecciones primarias.