Horas después de conocerse que el Gobierno propuso ante la Justicia de los Estados Unidos reabrir el canje de deuda para los bonistas que no ingresaron a las operatorias de 2005 y 2010, se conocieron las primeras reacciones de la oposición al respecto.
Ernesto Sanz fue el portavoz de la Unión Cívica Radical y celebró la decisión de la Casa Rosada porque demostró que "la realidad le ganó a las bravuconadas" del oficialismo que "durante mucho tiempo dijo que no iba a pagar un centavo a los fondos buitre".
En diálogo con Radio El Mundo, el senador admitió que "cuando llegue al Congreso" la propuesta "en la medida en que la reapertura del canje en idénticas condiciones con los bonistas originales, no tendríamos problema en acompañarlo".No obstante, aclaró que se trató de una "opinión personal que tiene que ser corroborada orgánicamente" con las autoridades del radicalismo, quienes ya mantuvieron diálogos "informales hace un mes", tras el fallo del juez Thomas Griesa con relación a los fondos buitre.
Sin embargo, desde el PRO evalúan con cautela la decisión del Gobierno. El economista Carlos Melconian aseguró que “falta la voz del resto de los protagonistas” que recién se conocerán entre enero y febrero del año que viene cuando la Cámara de Apelaciones estadounidense tomará una decisión sobre el proceso judicial en torno a la deuda.
"La reapertura por tercera vez del canje frente a los juicios debiera ser producto de una nueva negociación", estimó Melconian y recordó que la Argentina hizo "dos ofertas de un canje de deuda" con "una quita muy relevante". Además advirtió que "esas cosas se pagan porque el acceso de Argentina a los mercados no vino casi nunca más", dijo en diálogo con Radio Mitre.