El martes 5 de mayo, mientras el presidente Alberto Fernández comenzaba a analizar la nueva etapa de la cuarentena en la Argentina, el gobernador de La Rioja, Ricardo Quintela llamó al exvicepresidente Amado Boudou. Fue vía Zoom, a las 19.30. La charla, según pudo saber PERFIL, no duró más de una hora. El mandatario fue al grano. Quería comenzar a tejer una alternativa para el endeudamiento de las familias riojanas y las tasas de interés que pagaban empleados públicos.
Boudou lo atendió, le planteó su visión al respecto y el mandatario se quedó con la idea en la cabeza. A tal punto que luego decidió pasar a la acción y hasta se encargó de comunicarla con euforia: "Estábamos ayer en teleconferencia con el compañero Amado (por Boudou)", anunció Quintela, y agregó: "Tratamos un problema en particular: queremos desendeudar a los empleados públicos de La Rioja. Muchos tienen su salario comprometido, por estas financieras encubiertas, como Garbarino, Musimundo, o Tarjeta Naranja, ya que les financian las compras de los productos que ellos venden y luego, como son financieras, les comprometen el salario. Con el banco (de La Rioja) queremos comprarles estas deudas a los trabajadores, y darles un crédito. Se lo vamos a cobrar en cuotas que tendrán un 10 por ciento de interés anual", añadió.
¿Significa que el gobierno de La Rioja contrató como asesor a Boudou, algo prohibido por el fallo judicial que lo sentenció? Tras la repercusión en medios de la provincia, el asunto escaló hasta llegar al diario Clarín, donde se tituló: "El gobernador de La Rioja, Ricardo Quintela, anunció a Amado Boudou como su asesor". Esta mañana el mandatario negó rotundamente que sea su asesor, en diálogo con El Destape Radio: "Un compañero mantuvo una charla informal con Boudou. Lo saludé y me emocioné. Nos dio una mano enorme cuando estuvo en el Anses". El llamado, sin embargo, no fue de un asesor suyo, sino que lo hizo él personalmente.
Minutos antes el jefe de gabinete de la provincia, Juan Luna, tuvo que salir en su defensa, entrevistado en Buenos Días América. Primero negó que Boudou sea asesor de la provincia y luego, sobre el proyecto que ya parecía un hecho en boca de Quintela, le bajó el precio y hasta lo contradijo: "Es una medida que está en análisis de manera preliminar (...) Ninguna de estas operaciones está concluida, están en una etapa muy preliminar. Hay que ver si se puede lograr esto con las entidades financieras",
El entorno de Boudou relató a este medio que nunca se trató de una asesoramiento formal, sino que simplemente dio ideas a una consulta del gobernador. Según estas mismas fuentes Quintela no es el único funcionario público que contactó al exministro desde que obtuvo la prisión domiciliaria, el pasado 6 de abril. Al parecer se encargó de analizar situaciones de empresas públicas y privadas, no solo de Argentina sino también de empresarios del exterior.
