Este lunes es un día clave para los movimientos sociales más combativos nucleados en Unidad Piquetera: mantendrán una reunión con el ministro de Desarrollo Social, Juan Zabaleta, para tratar de resolver demandas. Y si no existe la respuesta esperada, prometen un acampe frente a la cartera. Fuentes oficiales recalcan que el diálogo está abierto y que el encuentro fue convocado por el funcionario nacional.
En el marco de la crisis económica, Libres del Sur, Barrios de Pie, el MST Teresa Vive, el MTR y el Polo Obrero, entre otras agrupaciones, remarcan la necesidad de incrementar y mejorar la asistencia a los comedores, además de concretar una apertura del programa Potenciar Trabajo. Ante la consulta de PERFIL, Silvia Saravia, coordinadora nacional de Barrios de Pie-Libres del Sur, explicó que ante el ministro, este lunes a partir de las 15, van a plantear “los reclamos urgentes que necesita una población castigada por la inflación y el ajuste (profundizado tras el acuerdo con el FMI): trabajo genuino, mejora en la asistencia a las familias, mejora en los alimentos con los que trabajamos en comedores y reapertura del Potenciar Trabajo”.
“Esperamos que el diálogo venga acompañado de resoluciones concretas: hace seis meses que traemos propuestas, sin respuesta”, agregó la dirigente social. Los acampes están programados por el momento desde el miércoles al mediodía hasta el viernes, aseguran desde una agrupación que forma parte de los reclamos.
Bajo este contexto, el Ministerio de Desarrollo Social refleja que el ex intendente de Hurlingham siempre se mostró abierto a las conversaciones con los movimientos más alejados del Frente de Todos, de hecho los recibió tres veces desde que asumió, y que incluso fue el ministro el artífice del nuevo cónclave en pos de resolver pedidos. “Juan siempre lo recalcó: no es necesario cortar la calle para hablar con él”, sostuvieron desde la cartera, que apuesta a generar trabajo genuino y tiene en marcha programas para fortalecer a las cooperativas y organizaciones civiles.
Existe un dato no menor para entender este conflicto: las protestas que Unidad Piquetera promete forman parte de un plan de lucha aprobado por 3.500 delegados de decenas de organizaciones “frente al ajuste, el avance de la miseria en los barrios y el pacto del Gobierno con el FMI” el pasado 13 de marzo.
En ese plan se establecieron movilizaciones, cortes de ruta y un acampe de 48 horas frente a Desarrollo Social para el jueves 31 de marzo. Y el 13 de abril realizarán marchas y cortes en todo el país, mientras preparan una marcha federal. El entendimiento que alcanzó el Poder Ejecutivo con el FMI es rechazado de plano por las organizaciones: consideran que “será un golpe a les trabajadores, tarifazos, aumento de transporte, salarios, jubilaciones y programas sociales de miseria y que seguirán cayendo por la inflación y una revisión trimestral del FMI, que constituye un cogobierno de hecho con el Fondo”.
Eduardo Belliboni, referente del Polo Obrero, dijo que “la unidad de ocupados y desocupados es estratégica para nosotros, porque enfrenta la ofensiva patronal unida la clase obrera ocupada y desocupada. Pero tenemos que ampliar este plenario defendiendo este plenario, no atacándolo, sosteniéndolo, ayudando a organizarlo, a que profundice sus medidas”.