Cientos de miles de personas salieron a las calles en la décima jornada de manifestaciones sindicales en Francia, que el martes terminó con 27 detenidos. Las movilizaciones aumentaron cuando el presidente Macron adoptó recientemente la modificación por decreto para evitar perder la votación en el parlamento de su reforma en el sistema de pensiones.
Las últimas marchas en las grandes ciudades estuvieron marcadas por disturbios y choques entre manifestantes radicales y fuerzas de seguridad. El gobierno y los sindicatos buscan cómo calmar los ánimos, pero ambos siguen aferrados en sus posiciones.
Disturbios y 27 detenidos
Es que el martes, casi dos semanas después de la aprobación por parte del Gobierno de la polémica reforma de las pensiones, cientos de miles de personas salieron de nuevo a las calles para reclamar la retirada de esta ley en protestas que registraron choques entre manifestantes radicales y fuerzas de seguridad en ciudades como Rennes, Nantes y París. Los sindicatos continúan con sus protestas, sin intención de rendirse.
En la capital, las fuerzas de seguridad lanzaron gases lacrimógenos contra cientos de personas, vestidas de negro y con la cara cubierta, que saquearon un comercio y prendieron fuego a basura, constataron reporteros de AFP.
Según datos del Ministerio del Interior, el martes, alrededor de 740 000 personas participaron en los movimientos, en tanto, 27 personas fueron detenidas.
Que dice la opinión pública sobre la reforma del sistema de pensiones
Los sondeos indican que dos de cada tres franceses se oponen a esta reforma que retrasa gradualmente la edad de jubilación de 62 a 64 años para 2030 y adelanta a 2027 la exigencia de computar 43 años (y no 42) para cobrar una pensión completa.
El gobierno considera crucial a su idea para evitar un déficit en la caja de las pensiones.
