Maradona está a punto de rearmar las valijas y retornar a la Argentina, tras una semana de internación en el spa italiano donde planeaba bajar al menos 5 kilos y medio y olvidarse de las derrotas de la celeste y blanca. Se dijo que el motivo del viaje era “charlar con algunos jugadores”, pero fue su médico personal, Alfredo Cahe, el encargado de desmentirlo.
“Fue idea de Verónica (Ojeda, su novia) y todos coincidimos. Dijimos que luego de los últimos partidos era conveniente que se alejara un poco de la prensa. Era necesario hacer un impasse psicológico, manejar y emprolijar las dietas”, señaló. Lejos de los rumores de separación, Maradona estaría acompañado por la blonda de Villa Fiorito, con quien sale desde hace más de dos años.
El plan de desintoxicación tiene un marco impresionante: el Palacio Merano de la clínica Henri Chenot, elegido por ricos y famosos de todo el mundo. El 5 estrellas está ubicado en el Tirol italiano y su director es un nutricionista que creó una disciplina médica llamada “biontología”, que estudia el envejecimiento físico y psicológico, “mediante una visión global del organismo que busca el equilibrio entre cuerpo y espíritu, y contempla la polución orgánica (exceso de acumulación de toxinas en el organismo) como causa principal del decaimiento y la fatiga”. Para combatirlo, propone una cura que “purifica el cuerpo, desintoxica el organismo, regenera y recupera la vitalidad”, según explica el mismo Chenot. Todo esto mediante la fusión de la medicina china, la kinesiología y la aplicación de sus teorías.
Con un costo de 2.500 euros por toda la semana, hay que agregarle los 230 euros obligatorios para la consulta médica inicial y habitaciones que van desde los 190 diarios la más sencilla hasta 750 la suite de lujo con vista panorámica a los Alpes: Maradona podría gastar más de 14.000 euros por una semana y media –unos 79.000 pesos– para bajar menos de 6 kilos. Pero para el “10” lo vale, porque tras el bypass gástrico que se realizó el 3 de marzo de 2005 en una clínica colombiana, con el que había logrado bajar 50 kilos, el director técnico volvió a caer en los excesos y nuevamente se lo ve gordo.
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